Dicen que Dios aprieta pero no ahorca, sin embargo lo único que quería Chloe ya no estaba segura de eso en el momento en que puso un pie fuera del quinto edificio que ya habia visitado ese día
“No se preocupe, nosotros la llamaremos” habia dicho la secretaria del dueño de la empresa, quien prácticamente no quiso entrevistarla para un puesto de trabajo, se preguntaba si el hombre realmente se creía tan importante como para hacer algo asi, su entrevista hacia sido por parte de su secretaria quien tampoco mostraba mejor actitud, le ofreció una sonrisa falsa y ensayada antes de despedirla del lugar con la falsa promesa de que la llamarían si la tomaban en cuenta cuando Chloe habia visto la decisión en sus propios ojos
Estaba perdiendo el tiempo
Pese al hecho de querer decirle sus cuatro cos
