Hambre y sed.

1300 Words
Al parecer soy importante para estas personas, aún no entiendo por qué siguen diciendo que son mis hijos de los más chicos puedo entenderlos, pero de los grandes no lo creo. Pero se nota que realmente aman a la persona que dicen que soy, sentirán decepción al verme así, que haya regresado sin ser esa mujer de la que hablan ser esa mujer fuerte que tanto admiran. Me hacen sentir como si hubiera fallado y realmente no quiero decepcionar a esas personas ¿Por qué? No lo se, pero no quiero hacerlo. Ya me cansé de estar así no notarán que estoy incómoda, además aún tengo hambre y sed, ay no ya me cansé. Me doy la vuelta y me caigo del sillón, me suelto riendo como tonta. —Lo siento, pero estaba muy incómoda con hambre y sed— les digo riéndome —¿Estás bien? ¿Te lastimaste?— me pregunta Matu —Estoy bien gracias, ¿puedo seguir comiendo?. —Si claro deja te caliento la comida. —Gracias Matu— le sonrió Es raro que me guste como se ve cuando digo su nombre y la forma en la que me mira me gusta de una forma que no puedo entender. —Amor, no Lilith aquí está tu comida y tu vaso con agua. —Gracias, ¿Te sientas conmigo?. —Si claro. —¿Entonces qué edad tengo?. —Bueno tú naciste en 1996. —Es broma eso quiere decir que tengo doscientos y pico de años. —Si contamos en esta vida tienes 28 años. —Soy vieja wow, ¿Cómo fue que desaparecí?. —Cuando quedaste embarazada de nuestros hijos, descubriste que uno de ellos iba a ser mortal, tomaste la decisión de darle tu inmortalidad, pero a cambio tú morirás y lo hiciste. Aparte de eso trajiste a tus hijos buenos nuestros hijos de la muerte, a tus padres, al esposo de Atenea, a la esposa de Morningstar. —¿Está casado?. —Los trajiste bajo una nueva generación— dice ignorando mi pregunta —Lilith nos amaste hasta el último día de tu vida, después de que moriste donaste todos tus órganos y cuando tu cuerpo desapareció las luces nos tocaron mostrándonos los recuerdos que tenías de cada uno. —¿En serio?. —Si, Lilith tú eres una persona muy especial para todos de esta casa has hecho cosas que nadie más puede hacer, por eso y muchas cosas más las personas te aman. —Ya veo y eso que tenemos ¿Por qué podemos hacer cosas que la gente no puede?. —Cualidades se llaman cualidades y hay dos tipos de personas, bueno ahora son tres, están las personas con cualidades, los descendientes y las ascendientes, en un tiempo los descendientes eran los más poderosos y fuertes. Esto se debe porque provenían de dioses, personajes bíblicos y eran inmortales, pero tú creaste una nueva generación que no son descendientes, pero tienen la misma fuerza que los descendientes— me dice Atenea —Y si yo era inmortal se supone que soy o era un descendiente ¿De quién era?. —Descendiente de Lilith la primera mujer del mundo, la primera esposa de Adán y como tú dices la reina del infierno— me dice Morningstar —Entiendo, los descendientes tienen el nombre de quienes son descendientes, entonces tú eres descendiente de la diosa Atenea, tú de lucifer y ¿tú de quién eres Matu?. —Artemisa, pero como no nací en la ciudad no llevó el nombre de quién soy descendiente. —¿Y los niños pequeños son descendientes?. —Liam y Maya son descendientes nórdicos, Liam es descendiente de Freyr con cualidades de Odín y Thor, Maya bueno es una persona muy poderosa es descendiente de las diosas nórdicas más fuertes Freya, Jord, Gefjun, etc. —Ok, me encantaría conocerlos, pero bueno donde vamos a dormir estoy cansada y por lo que veo hay mucho que contar después de todo son más de 200 años. —Bueno Rosy ya tiene su habitación y todos pensamos que deberías de dormir en la tuya, donde estabas acostada hace rato. —La cama era cómoda así que por mí está bien. —Pero yo duermo ahí ¿hay algún problema?. —Solo si duermes mal. —Duermo tranquila, te prometo que no molestaré. —¿Entonces me acompañas o subo sola?. —Vamos, buenas noches nos vemos en la mañana. —Duerman bien— les digo a todos —Buenas noches Lilith. Subo las escaleras con Matu, abre la puerta y entramos, si pudiera describir como me siento estando con ella podría decir que me siento cómoda, como en casa, pero siento que algo falta no se que es, no me siento completa y estoy segura de que mis recuerdos tienen que ver con una parte de eso. —Amm Lilith. —Si Matu. —¿Sufriste mucho estos 7 años?. —Al principio fue duro no podía hacer nada, el querer hacer algo y no poderlo hacer era tan desesperante me sentía impotente, la mamá de Rosy trabajaba duro para mantenernos, Rosy me cuidaba mientras no iba a la escuela, con el paso de los años recuperé la movilidad de la mitad de mi cuerpo. Me construyeron una silla de ruedas así que podía valerme un poco por mi misma y cuando pude moverme completamente pasó lo de la parálisis, pero lo más duro fue la muerte de la mamá de Rosy cuando nos fuimos a vivir con el padre de ella ni siquiera lo conocía era un alcohólico y drogadicto. Siempre nos golpeaba hasta que se cansaba y las personas no hacían nada a pesar de que pedíamos ayuda y así fue como se formaron las cicatrices que tengo en mi cuerpo. Cuando ese hombre quiso golpear con una cadena a Rosy no sé de dónde o cómo saqué las fuerzas para golpearlo, ni siquiera sabía pelear, pero termine rompiéndole las manos y los tobillos. Su cara dios la cara de él cuando vio mis ojos brillar fue de miedo, nunca había visto que alguien me mira así y cuando Rosy dijo que a las personas como nosotros nos matan sentí un dolor profundo, pero tristeza a la vez, no somos diferentes a las otras personas ¿por qué matarnos?. —Lo siento mucho si pudiera regresar el tiempo y evitar que pasarás por eso lo haría sin pensarlo, el que hayas vivido todo eso me parte el alma como no tienes idea. —¿Puedes hablarme de mí?. —Eres buena peleando demasiado buena nadie pierde contra ti eres la mejor guerrera que he conocido en mis dos vidas— suspira —El porqué matan a las personas como nosotros, no lo sé miedo tal vez o simplemente piensan que somos aberraciones y quieren deshacerse de nosotros. En el pasado hubo una empresa que nos secuestraba y experimentaban con nosotros para tener nuestras cualidades y tú junto con la ayuda de Samuel y miles de personas lucharon para acabar con esa empresa. Desde ese entonces Morningstar, Atenea y tú van a misiones a salvar personas que son como nosotros tú salvaste al hijo de Atenea Dixon, estaba en un orfanato y lo tenían en un sótano sin comida y agua aparte lo golpeaban sin parar diciendo que tenía un demonio dentro. ¿Sabes qué le hiciste al padre? Le rompiste las muñecas y los tobillos junto con una que otra costilla, Morningstar y Atenea me dijeron que era como tú firma siempre les hacías eso a las personas que les hacían daño a los niños. —Eso es no tengo idea de que es, pero— bostezo —Tal vez tenga algunos recuerdos en mi subconsciente. Siento como mis ojos se cierran y me quedo dormida, tranquilamente dormida.
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