—Señorita Sara ¿Se encuentra bien? —Escuchaba una voz a lo lejos.
— ¿Que pasa?
—Se ha quedado dormida, ya son las 9 de la mañana y es extraño que siga acostada.
—Creo que me ha costado conciliar el sueño, al menos no he tenido esos dolores.
—Veo que se ha quedado noche con el teléfono, recuerde que pasar mucho tiempo le puede provocar los mismo dolores.
—No, de hecho lo tengo apagado, solo revise unas cosas y lo apague, no entiendo cómo podía tener amigas tan falsa y una una vida tan así.
—Muchas veces dependerá de las personas que le rodean, ahora es hora de bañarse, lr tendré listo su desayuno.
—De acuerdo
Lo primero que hice fue buscar mi ropa, como mis intenciones eran conocer nuevamente la ciudad, necesitaba ir con ropa cómoda, fui a la ducha y me sentí relajada cuando el.agua
