Esa noche tal como Jhon había dicho mandó por nosotros, una limosina esperaba afuera de la casa a las 7:30 P.M., papá aún no había visto el vestido que escogimos, pero al verme se quedó sorprendido, el vestido que escogí era hasta un poco arriba de las rodillas, solo me tapaba los hombros y era un poco abierto de atrás, Karen me había prestado unas joyas y me ayudo a maquillarme.
—Esta noche se ilumina con tu Belleza —dijo mi padre.
—Gracias Papá, me harás sonrojar.
Subimos a la limosina, nos ofreció algo de tomar, pero la verdad no queríamos nada, al llegar alguien nos abrió la puerta del vehículo, en esta ocasión no nos encontraron afuera.
—Sigan por acá —nos dijo alguien de servicio.
Antes de llegar al comedor, nuestros anfitriones salieron.
—Han, mírate cómo has cambiado, los año
