Haz silencio y corre

capitulo 21

te amo amor te amo mucho - le dije y él sonrió para luego morir en mis brazos - AAAAAAAA -grite fuerte con toda la bronca.

de repente me desperté en la cama boca arriba, los chicos dormían incluso maria, si dormía boca arriba siempre tenia pesadillas , limpie las lagrimas de mis mejillas y baje de la cama para salir al pasillo, suspire y fui hacia mi bolso que luego recorde que habia olvidado en el laboratorio y no tenía cigarrillos y en este momento necesitaba uno.

agarre las llaves de la moto y apareció Brad en mi campo de visión.

no tengo cigarrillos - hable-

iré contigo, a no ser que seas como el padre de Nelson - reímos los dos y salimos del bunker.

subí a la moto y el subio detras mientras tenía mi arco y algunas flechas ya que yo no podía, maneje rápidamente hasta llegar a un negocio de el vecindario, dejamos la moto en la puerta y entramos, agarre varias etiquetas de pucho y algunos chicles.

creí que debíamos dejar a los demás - hablo bromeando brad.

el vicio no, eso lo llevamos todo - rei yo negando - ¿quieres algo? yo invito

una cerveza ¿ quieres? - me miró y negué pero agarre una botella de vino blanco dulce.

por esta noche podemos romper nuestra dieta - reina.

acelere la moto un poco por el vecindario y Brad río cuando la levante y la deje en una rueda y casi tira mi vino. cuando llegamos a la casa Joaquín estaba sentado medio dormido sin entender qué pasaba.

me despertó tu moto ¿ adonde fueron? - pregunto mirando las cosas en nuestras manos.

a comprar - dijo brad reino.

nos olvidamos los bolsos en el laboratorio por ende los cigarrillos - le comente y me senté a su lado.

¿me trajeron algo? - pregunto y negamos, el río.

luego del vino digamos que nos habíamos puesto alegre y queriamos mas asique con brad fuimos de nuevo al negocio y sacamos al menos 10 botellas de vino, pusimos las reposeras en el patio y nos sentamos a tomar vino, fumar y a contar cosas de nuestra vida, brad fue el que más hablo ya que mucho de él no sabíamos. en algún momento se ve que nos dormíamos sentados ya que el sol en nuestra cara nos despertó, los grandes nos miraban riendo mientras nosotros tapamos nuestros ojos y nos agarramos la cabeza del dolor por la resaca.

papá nos dio unos remedios caseros para que tomemos pero aún podía sentirme borracha, no habían pasado las suficientes horas para que el alcohol se absorba y me sentía de la v***a pero si alguna vez había aprendido algo había que ponerlo en práctica, tome unos tragos de vino de la heladera y saciar mi sed y a la resaca.

no deberías hacer eso - dijo Roberto sonriendo.

deberías saber que es la única forma de que pase el malestar - lo mire - eras alcohólico se nota, tal vez estés enfermo

si, tengo cirrosis pero la sobrellevo - me comentó el más serio.

siento escuchar eso y lamento haberte echo hacer fuerza, deberias hablar con papá tal vez puede hacer algo para tus malestares si es que los tienes - el asintió y yo le sonreí -

gracias morgan - habló el y salio de vuelta por la puerta del bunker,

entonces el portón ya esta solo falta ponerlo - hable y walter asintió - bien entonces hay que ubicarlo, debemos encontrar algo con que trabajar

ya está - dijo maria - hicimos estos palos con papa, así en chicos los tenemos en la granja y nos servían muy bien

bueno, los probaremos de resistencia y si no buscaremos otra solución - dije y vi a papá sentado lejos de los demás - hola pa ¿todo bien por ahí abajo?

si hija, espero que funcione con lo que me han traído sino no se como podremos acabar con esto - dijo el un tanto agotado, lo veía a veces pasaba más de 12 horas en el laboratorio.

tampoco quiero que te sobre exijas pa, hazlo a tu tiempo, sabes que ahora con el muro será todo mucho más fácil asique por favor no te sobre exijas demasiado - dije para que el cabeza dura entienda.

bueno hija, hoy me lo tomaré libre - hablo para dejarme mas tranquila y asentir.

cuando terminamos de colocar el portón probamos afuera empujarlo con todas nuestras fuerzas y no se abrió, había hecho un buen trabajo maria y roberto, teníamos 4 casas con muros y patio grande, ya podían andar tranquilos los chicos, hacer su huerta y entrenar tiro con arco.