“Cuando alguien desea algo debe saber que corre riesgos y por eso la vida vale la pena.” Paulo Coelho La presencia de Zoe en la empresa provoca impotencia en Macarena, no sólo no podía estar en la empresa, sino que tampoco podía manipular a Francesco y que este asumiera su papel de hombre por primera vez. Zoe se había salido con la suya por ahora, pero Macarena debía pensar como acercarse a Franscesco y lograr que éste la colocará dentro de su testamento, aunque sonaba cruel, ella no iba a perder más de quince años al lado de él sin que ello la beneficiara. Eso no lo permitiría. Tomó su móvil y marcó el número de su amante ocasional. Bruno Oliviera era el hombre capaz de devolverle el poder de ser una mujer deseada apesar de estar próxima a sus cincuenta años, era su colágeno natural. —