══ஓ๑Bad Girl๑ஓ══

•Hablar.

NOAH

Los labios de Destiny seguían moviéndose contra los míos, sus manos sostenían mi nuca ejerciendo presión para profundizar el beso. Por un momento mi mente se quedó en blanco, no creí que fuera a volver tan pronto, supuestamente su viaje era por tres meses si ganaba la competencia internacional.

Dess y yo comenzamos a salir hacer varios meses atrás, pero cuando tuvo que viajar por la competencia cortó lo nuestro excusándose con que no sería capaz de mantener una relación a distancia. Al principio estuve mal, lo admito, ella es una chica increíble, una de las mujeres más maduras, responsables y con un enorme futuro que conocí en mi vida.

Pero yo ya no siento lo mismo.

El silbato del árbitro me trae de nuevo a la realidad, justo en el momento que ella termina el beso y me mira sonriente.

—¡Ve a romper esas piernas, lobo!

De a poco las porristas fueron abandonando el campo, la hora de jugar llegó. Me coloco el casco trotando a mi puesto, mi mente sigue en blanco y no puedo pensar en otra cosa que no sea "¿Que carajos?". Busqué entre la tribuna a los chicos, allí estaban, Mo gritaba alocada y abrazada de Liam. Ambos habían hecho pancartas con el logo de Los Lobos de West High, traían la cara pintada con los colores del equipo y usaban gorros realmente ridículos.

Estaban en su salsa.

Por otra parte, Alai, tenía ambos pies apoyados en la valla, esta comiendo palomitas de maíz mirando precisamente hacia donde van las porristas. Quizá no notó que su mejor amigo no estaba allí. La miro unos segundos más con la esperanza de que me mire, sus ojos esta noche estaban brillantes, parecía emocionada por estar aquí. Mo golpea su brazo y me señala, al verme me sonríe un poco y agita su guante gigante en señal de animarme.

—¡Steven, presta atención al juego! —el entrenador llama mi atención.

—¡Posiciones!

El árbitro nos llama a mi y al capitán del equipo rival para lanzar la moneda para empezar con el primer juego de la temporada.

Ahora sí, a patear traseros Frendfureanos.

En los primeros quince minutos nos dedicamos a estudiar bien al rival, cómo se ubican en la cancha y las estrategias de pases largos o cortos que usan. Llegaron a anotarnos cuatro puntos, pero remontamos con dos arriba.

—¡Peter! —le lanzo el balón a mi amigo que instantáneamente comprende las órdenes y corre a toda prisa.

Taclea a dos del equipo contrario logrando zafarse del bloqueo bestial que se le venía encima, corriendo desesperado con nosotros detrás de él tratando de defender su trasero. Pit gira un momento tratando de ubicarnos y le lanza el balón a Darrel que lo recibe en el aire.

—¡Corre y anota! —grito desesperado.

Nuestro medio campista corre por su vida y lo veo anotando otro punto para los Lobos antes de ser tacleado fuertemente por la espalda.

Tirado en el suelo boca arriba intento recuperar algo de oxígeno, siento un fuerte dolor en mi columna pero se desvanece de a poco en cuanto logro ponerme de pie. Pit corre hasta mi preocupado, pero se tranquiliza al ver que le sonrió.

—¿Estás bien? —pregunta.

—Mejor que nunca.

El entretiempo inicia dándonos dos minutos de descanso para hidratarnos y planear nuestra jugada. Trotando a las bancas miro a mis amigos alentando en las gradas, Liam grita desesperado agitando sus brazos en el aire, Mo aplaude orgullosa y Alai se paró en su asiento. No escucho nada de lo que dice pero deduzco que está insultando al chico que me tacleo porque lo está señalando con el guante gigante en su mano y gritándole con la cara desencajada.

—No sabia que Tyson disfrutaba tanto del fútbol —se ríe Fred.

—Mírala, parece un barrabrava —bromea Peter.

Minutos después se percata de que la estamos observando y se sonroja aún más, le lanzo un beso que me devuelve con timidez.

—Oye, yo que tú dejo de lanzar besos a la tribuna, parece a tu chica no le agrada —me codea Jackson.

Miro en dirección a la banca de las porristas y efectivamente Dess me observa con cara de pocos amigos. No le doy importancia dado que el entrenador nos llama a la ronda táctica, es momento de poner la mente en el juego.

ALAI

Ya van tres tiempos de doce minutos cada uno, West High gana por dos puntos pero en estos últimos minutos nadie sabe que puede suceder. Los chicos de Frendfurg juegan bien, hay que admitirlo, pero nuestros lobos se dan a lucir.

Al menos esta noche.

Peter y Fred hicieron un trabajo excelente defendiendo nuestro trasero, Noah anotó seis de los ocho puntos y también derribó algún que otro contrincante.

Aún aquel beso de Steven con aquella chica sigue dando vueltas en mi cabeza. Al parecer es un chico comprometido y no dijo nada al respecto, trato de concentrarme lo más qué puedo ya que solo faltan diez minutos para que acabe el partido.

Sólo diez eternos minutos.

—¿Todo en orden? —Liam me pasa la gaseosa fría.

—Si, sólo estoy nerviosa.

—¿Debería creerte? —sus ojos me examinan de arriba a bajo.

—Deja de mirarme, me molestas.

El castaño se ríe y me lanza unas palomitas. Abrí la boca atrapando solo algunas.

—Oye, voy a preguntarte algo —le devuelvo la bebida y Liam me presta absoluta atención.

—Soy todo oídos.

—¿Quién es la chica que besó a Noah? —sus ojos se entre cierran ante mi repentina pregunta —A lo que me refiero ¿Va por la vida besando mariscales de campo?

—Destiny es la novia de Noah, o algo por el estilo. Comenzaron a salir hace unos meses atrás.

—¿Y por qué jamás me lo dijo?

—¿Debería decírtelo? —Liam ríe confundido.

El silbato del árbitro sonó dando por terminado el primer partido de la temporada, o algo así habían dicho, sinceramente no entiendo ni mierda. Les ganamos a los idiotas de Frendfurg por humillación, ya quiero que sea el próximo partido. Ambos equipos se saludan, al igual que las porristas y de a poco se van vaciando tanto el campo de juego como las gradas.

—Iré por Britney —avisa Mo.

—Bien dile que la esperamos en el jeep —le planto un beso en su mejilla antes de que se marche.

—¿Tu amigo apareció? —Liam pasa su brazo por mis hombros.

—No, supongo que debe haber ido a su casa. Luego lo llamaré.

—Te preocupas demasiado.

—Es mi mejor amigo —detengo mis pasos y lo miro.

—¿Sólo tú mejor amigo?

Liam da un paso hacia mi, sostiene mi barbilla para que lo mire directo a los ojos. En cualquier escena de película esto sería romántico, pero no lo es, es incómodo y confuso lo que hace.

—Invasión de burbuja personal, amigo.

—¿Te sientes incómoda? —sonríe.

—Liam ¿A dónde quieres llegar com todo esto? —entorno mis ojos corriendole la cara.

—Bien, te lo diré —suspira pasando varias veces la mano por su rostro—. Me gustas ¿Si? Te lo dije, me pareces una chica genial y quisiera que me des una oportunidad de demostrar que yo...

—¿Es broma? —mi boca se mantiene entreabierta—, Liam, casi ni nos conocemos.

—Ese es el punto, quiero que me conozcas y me dejes conocerte.

—Bueno, yo...no creo que...

Antes de que pudiese darle una respuesta los chicos ya venían camino al jeep también, Fred y Peter venían empujando a Mo o molestando a Brit que ya estaba bastante irritada, lo disimula bien, pero sé que esta juntando todas sus fuerzas para no golpearlos. Detrás de ellos aparecen Steven y la castaña caminando a paso lento, conversan en tono bajo, Noah al verme sonríe.

—Felicitaciones bobos, hicieron un gran partido —abrazo a los tres, Liam carraspea incómodo detrás de mi.

—¿Era cierto lo de tus nuevas amigas? —la castaña sonríe confundida.

—Claro, dije que nos iríamos con ellas —responde Noah con simpleza.

—Crei que hablabas de porristas, digo como Britney es...

—Te las presento. —la interrumpe—Bueno, ella es Morrel y por aquí está Tyson.

Le sonrío brevemente estirando mi mano, la castaña analiza unos segundos antes de apenas presionar la mía y no quitarme su pesada vista de encima. Un silencio incómodo se instaló en el grupo, Noah me mira como queriendo advertirme algo, pero solo lo ignoro y sigo desafiandolo con la mirada.

—Un gusto —sonríe seca.

Luego de la incómoda y forzada presentación todos subimos al Jeep para ir a casa de Peter, por el triunfo de hoy nos invitó a cenar carne asada para festejar que clasificaron con una muy buena puntuación. En el camino las que más hablaron fueron mi hermana y Dess, sobre la competencia, el viaje, una nueva cultura y sobre el futuro del equipo de porristas que la verdad deje de oír porque no me interesa.

—Podrías sumarte ¿Qué opinas? —la castaña se gira a verme sonriente.

—El deporte no es lo mío. Pero gracias de todas formas.

Liam me codea en cuanto ella se gira para seguir hablando con mi hermana. Estoy entre medio de Steven y su primo, aquí atrás la tensión se siente fuerte. Noah y su chica, Liam y sus confesiones, me agobio.

—Cariño ¿Crees que podemos ir a tu casa luego de cenar? —Destiny pasa su mano hacia atrás buscando la de Steven.

—Si, claro —contesta él incómodo.

Bueno, creo que se cancela la cena de amigos muy amigos.

Minutos después llegamos a casa de Harrison, sus padres estaban asando la carne en el patio trasero y acomodando las mesas para comer todos juntos. Brit se va junto a Peter y Fred a comprar bebidas, la madre de Pit se acerca para saludarme.

—Tu eres Alai ¿Verdad? —me sonríe.

—Si, un gusto conocerla señora Harrison.

—Dime Stella. Peter me habló mucho de ti —la madre de Pit toma mi brazo invitándome a caminar con ella hasta la mesa.

—¿Enserio le habló de mi? Pit es un chico increíble, a decir verdad...—toma mis manos entre las suyas, un gesto que me hace sentir bien—fue él quien me integró al grupo.

Stella pasa los siguientes minutos hablándome sobre su hijo, es hermoso como esta mujer habla de Peter de lo buena persona que es y del enorme corazón que tiene este chico. Supe por ella que su padre falleció cuando él era apenas un pequeño niño de ocho años, eso lo afectó muchísimo a nivel anímico pero con mucho esfuerzo logró salir de una depresión bastante severa.

—Frederic y Noah han sido muy importantes en su recuperación, jamás lo dejaron sólo. Por otro lado Chester, mi esposo, también fue muy buen compañero para Peter...

—Lamento mucho su perdida, Stella. —me sincero—Pero ¿Por qué me cuenta esto?

—Eres amiga de mi hijo, caíste en un buen grupo, los muchachos son muy buenos y siempre van a estar para ti y te cuidarán —la señora Harrison se pone de píe pero antes me dice unas últimas palabras—. Noto tu mirada un poco triste, me gustaría poder conocerte más.

Se va dejándome bastante confundida ante la historia que me contó y el porqué. Si es cierto que estoy un poco desganada pero quizá sea por el largo día, el partido consumió gran parte de mi energía y me siento un tanto cansada. De todas formas también quisiera conocer más a los padres de Pit, parecen buena gente y Stella es la típica madre amorosa de esas que si te sientes mal o tienes un mal día te preparará un té, te lo llevará a la cama y te hará caricias mientras lloras contándole lo que te está atormentando.

O bueno, esas vibras me da.

Por la puerta aparecen Noah, la castaña y Liam, al verme Steven se acerca y se sienta junto a mi.

—Conociste a los padres de Peter —afirma.

—Si, hablé un poco con la señora H.

—Dile Stella, no le gustan las formalidades —deja escapar una mueca divertida—. Oye ¿Crees que podemos hablar un minuto?

—Estamos hablando.

—Si, yo decía...—gira su cabeza sobre su hombro viendo a Destiny que habla muy animada con la madre de Peter, al parecer ya se conocían—a solas.

Lo pienso un momento pero supongo que quiere hablar sobre la cena que quedó más que cancelada. Asiento poniéndome de pie y ambos entramos a casa de Peter, Noah me guía por un pasillo e ingresa a una habitación cerrando la puerta por detrás de él.

—¿De qué quieres hablar? —me siento en la cama, claramente ésta es la habitación de Pit.

—De ti y de mi —se sienta junto a mi—, pero antes...

Su mano atrapa mi mejilla dejando sobre mis labios un pequeño y tímido beso que apenas me roza, me alejo abruptamente al tomarme de sorpresa. Steven me observa apenado pero rápidamente reacciono y me acerco veloz mente hacia él para besarlo.