Narra Sarah Matheus. —¡Sarah! Cariño, que alegría verte de nuevo— exclama mamá emocionada, yo le sonrío y me acerco para darle un abrazo, ella me besa la mesilla y sostiene mi rostro entre sus manos, para mirarme a los ojos. — Estás muy hermosa, has crecido más, ya eres una mujer— vuelvo a sonreír mientras digo, te extrañé mamá, ella asiente para abrazarme y en ese momento Henry nos aprieta a los dos en un abrazo… —Que bonito, ahora sí está toda la familia reunida— mamá pone rígido su cuerpo y se suelta del abrazo para cambiar la conversación. —Bien, voy a servir el almuerzo, ¿me imagino que debes estar hambrienta?— yo asiento, ella camina a la cocina y henry me abraza llevándome afuera para tomar un poco de aire. —Ya venimos mamá, estaremos afuera nos avisas cuando esté el almuerzo—