Advertencia: Mención de muerte de personajes, relaciones toxicas, relaciones no consensuadas, y comportamientos que pueden llegar a incomodar al lector, se recomienda discreción. sin más, disfruten el capítulo.
Emiliano de San Carlo es el rey del reino del Oeste y por supuesto el enemigo número uno del reino del sur, no porque le guste eso, sino, que todo esto tiene su origen por una larga disputa entre los antiguos reyes que antes gobernaron San Carlo junto con el reino sur de Escalante, y bueno, él estaba más que dispuesto a hacer la paz con dicho reino. Sin embargo, el mayor obstáculo de lograr esto era una persona en especial; el marqués de Valentino, quien estaba prometido para la princesa Olivia.
Una vez que ese hombre tome el poder del reino Sur, la guerra será inminente. Pero, Emiliano quería evitar a toda costa eso. Pues, él más que nadie sabe que su destino era llevar la paz a ambos reinos y lo lograría una vez él fuera el esposo de Olivia. Le costaba entender todo esto en un principio, pero, después de un tiempo, las pistas que marcaban su destino fueron apareciendo lentamente.
Justo como había sucedido en su vida anterior.
¿Y como sabía eso Emiliano? ¿Cómo se acuerda de su vida pasada? Era fácil de explicar.
El reino del Oeste era especial por muchas razones, una de ellas era poseer la magia que fue regalado por la diosa que ejercía su aprecio por el reino del Oeste, (Quien sentía compasión hacia la humanidad y deseaba que estos seres encontraran la manera de no destruirse), y para que siempre estuvieran en armonía con ella, les otorgo la bendición divina de manipular la magia, el poder de la predicción sagrada y por supuesto, el don ver sus vidas pasadas, un poder que fue regalado al reino del Oeste, el cual se había doblegado ante la presencia de la Diosa, reconociéndola también como su gobernante, aquel era un gran poder que siempre serviría para el bien, para asegurarse de esto, la familia real y sus allegados más cercanos se encargarían de esto, y el secreto permanecería oculto, más que nada, de los enemigos del reino.
La razón por la cual el marqués de Valentino quería poseer el reino del Sur, era por primero; La princesa Olivia y segundo entrar en guerra con el reino del Oeste para robar su magia. Quien haría todo lo que estuviera en sus manos para lograr esto, y por supuesto, ser el mortal con mas poder de los cuatro reinos, ya tenia comiendo de la palma de su mano al reino Sur, una vez fuera rey, se encargaría de tomar el reino del Oeste por la fuerte y después, lo demás seria pan comido.
Cosa que Emiliano impediría, lo haría y por eso sabía que tenía que hacer.
Por eso tenía que reunirse con la princesa (Aunque él sabía que sería difícil que ella supiera de todo esto, haría su mayor esfuerzo), él empezaría desde cero, la conquistaría, la protegería, la amaría y finalmente hacerla su esposa.
Pero, en fin.
Emiliano recuerda con detalle su primera vida.
Una vida dónde todo parecía ser guiado por el destino, la primera vez que vio a Olivia fue cuando eran a penas unos infantes, y como tal, estaban prometidos desde jóvenes, la diferencia es que, ellos se gustaron inmediatamente y con el pasar de los años se enamoraron.
Y si bien fue algo complicado demostrarle al rey del reino Sur que él, un hombre del reino Oeste estaba enamorado de su hija, con el tiempo, fueron aceptando todo esto, cabe mencionar que, en esa primera vida, el marques de Valentino estaba completamente en contra, pues él también deseaba a Olivia, pero, ella había dejado en claro su rechazo.
—¿Qué acaso todos en la corte de Escalante han perdido la cabeza? —Gritaba el Marques con una expresión de odio en su cara. —Este hombre y todo su linaje solo traerán desgracia al reino y al país del Sur. —La expresión del marques de Valentino era de completo odio hacia Emiliano.
—Marques de Valentino, ¿Esta seguro de sus palabras? Después de todo, esta hablando de nada más y nada menos que el rey del reino del Oeste. —El padre de Olivia, que para ese entonces no había sido envenenado por la influencia del marques, estaba escuchado todo esto.
—Y quien es mi prometido también, marques, debe medir sus palabras. —Olivia que también estaba ahí, sentía asco, pues sabía que las intenciones del marques con ella, iban más allá que una simple formalidad.
—Solo digo sus majestades que, la princesa debería casarse con un hombre que sea originario de su reino, no de un extranjero que podría estar planeando la dominación total del reino. —Las palabras del marques dejan a mas de uno en la corte pensando, incluso Olivia piensa en que aquella era una locura, por otro lado, Emiliano que escuchaba todo esto escondido, se dice que es hora de hacer su gran aparición.
—Este matrimonio se ha concertado desde hace muchos años, con la intención de que la relación entre ambos países sea mejor, marques es algo que usted sabe de antemano. ¿Por qué a esta altura estaría el rey del país del Oeste interesado en romper la relación que se ha formado con tanto esfuerzo? —Olivia no pretende dejar que aquel detestable hombre, arruine todo lo que ella ha logrado.
Simplemente era detestable.
—Princesa, usted como la futura reina del país del Sur y del reino de Escalante, debe apartar sus sentimientos del deber, ese hombre no es bueno para usted. —El marques desea imponerse por ante quien sea, incluso ante la princesa que tanto desea.
Emiliano sabe que es hora de hacer acto de presencia.
—¿Y no será que el marques de Valentino solo tiene sentimientos de envidia al saber que la princesa ha decidido casarse por amor verdaderamente conmigo y no con usted? —La fuerte voz de Emiliano resuena en el salón de discusiones, y las miradas pronto caen sobre él, también, el marques mira irritado al hombre que ha arruinado sus planes. —Le recuerdo que usted es mucho mayor que la princesa y casi podría ser su padre, después de todo, la ha visto nacer. —La corte se llena de murmureos.
—¡¿Y que insinúa usted, rey Emiliano de San Carlo?! —El marques finalmente parece explotar ante la presencia de su enemigo jurado a muerte. —La edad es insignificante cuando la sabiduría y el crecimiento que podría otorgarle a la princesa, conjuntamente con el reino del Sur, es mayor en todo sentido. Mientras que usted, no ha tenido una buena reputación por estos lados. —Emiliano sonríe burlesco hacia el hombre que, no parece darse cuenta de que esta hablando con un soberado, poderoso.
—¿Sera porque usted se ha encargado de manchar mi reputación, marques? —Pregunta Emiliano. —Después de todo, usted ha hablado mal a mis espaldas en un intento denigrante de convencer a los súbditos, y gobernantes del reino Sur de que yo, no soy capaz de otorgarle a la princesa el futuro que se merece. —Emiliano aclara su voz. —Además, le recuerdo que mi matrimonio con la princesa fue algo que el mismismo rey ha concertado, ¿Estas cuestionando la decisión de tu rey, marques? —La atención del mencionado rey (padre de Olivia) cae en el marques que, parece ahora sudar frio.