—Corta la llamada —Su voz fue tan áspera y alta que mi confusión fue hasta los cielos. No lo expuse, no le dije que me dio trabajo y, aun así, luce furioso. Iba a retarlo, decirle que no iba a cortar el teléfono porque él me lo pidiera, pero noticias para mí, Ashton es mi jefe, y tengo que acatar sus órdenes si pretendo seguir trabajando aquí, así que lo hice, corte el teléfono aun escuchando los gritos de Mara diciendo que no me atreviera a hacerlo. No lo hice para obedecer, lo hice porque... Deseaba hablar con él, lo ansié todo el día, aunque fuera para pelear, no me importaba, mi cuerpo rugía por su atención. Su nariz arrugada y su feroz mirada se clavaron en mí como dos dagas, lo que le dio más contexto a lo que iba a decir: —¿Qué crees que haces? Ya casi no había nadie en la empre