Sin mucho esfuerzo, los policías se encargaron de esposar a los tres matones y encerrarlos en el coche.
Se habían rendido.
Mientras tanto, miré al chico, sentado en el suelo.
- Em... ¿Estás bien? – dije agachándome para estar a su altura.
Este no me miraba, solo veía hacia abajo.
- Oye... "T"
Sin más, se desplomó hacia atrás.
Fue ahora cuando me di cuenta de que tenía más heridas que antes.
- Chico – dije meciéndole con suavidad el cuerpo.
- Apártese señorita – dijo amablemente un médico mientras se acercaba al chico.
- ¿Estás herida? – se acercó a mí una médica.
- Es...estoy bien – dije algo asustada por la situación en general.
Vi cómo le hacían pequeños tratamientos al chico y, a la vez, lo subían sobre una camilla.
- ¿Eres familiar? – me preguntó uno de ellos.
- No....pero soy su amiga – mentí.
De esta manera pude subir a la ambulancia con ellos.
No podía quitar la mirada de "T".
- ¿Cuál es su nombre? – dijo uno de ellos.
- Su nombre...em... - recordé la palabra en la mesa- Taehyung.
- ¿Y su apellido?
- N...No lo sé, nos conocimos hace poco y él sólo me dijo ese nombre.
- Oh...entiendo – dijo mientras rellenaba una ficha.
Una vez en el lugar, lo internaron al menos hasta que despierte y se sepa su estado. Tuvieron que darle algunos puntos tanto en el abdomen como en la ceja. El resto solo eran superficiales.
Tenía algunas tiritas o gasas cubriendo las más leves.
Le pusieron la ropa de hospital y le pusieron una vía intravenosa con suero.
- Necesito que vengas conmigo – habló una enfermera.
Sin decir nada, me levanté de la silla en la que estaba al lado del chicho y fui con ella.
- Sois amigos... ¿no?
- Algo así...
Ella sabía que yo estaba mintiendo.
- Me imagino que aparte de su nombre, no sabes más información de él como su edad, número de tarjeta de identificación, algún teléfono de un familiar o cualquier dato esencial, ¿me equivoco?
Yo negué con la cabeza en un suspiro.
- Solo sé que vive en la calle y creo que es mudo...tampoco estoy segura de que se llame Taehyung, pero es lo que él escribió.
Ella asintió con un suspiro.
- Bueno, igualmente gracias por la información – sonrió – no te preocupes, por suerte mejorará. Ya nos encargaremos nosotros de encontrar los datos del paciente.
Yo asentí devolviéndole la sonrisa.
Volví con el chico, quien empezaba a abrir los ojos.
- Oh – me acerqué hasta él – T, ¿estás bien?
Él miraba a su alrededor sin entender bien.
Seguidamente miró hacia abajo, viendo su nuevo vestuario. Levantó su mano y miró la vía.
Fue entendiendo dónde se encontraba.
Y su cara expresaba máximo terror.
Entonces enloqueció.
Con su otra mano intentaba arrancarse la vía para huir.
- ¡NO!¡T, PARA! – grité mientras me apresuré a agarrar sus manos.
Empezó a moverse con brusquedad.
Por supuesto que este no decía palabra, solo se le veía con el objetivo de escapar.
- ¡Ayuda!
Segundos después, dos enfermeros sostenían al chico, pero este seguía pataleando, siendo asi uno de los enfermeros el que recibió un golpe.
No podían frenarle, por eso un tercero llegó al lugar le pinchó un calmante.
Aquello lo dejo demasiado tranquilizado.
- Tranquilo, no te haremos daño – habló uno de los enfermeros mientras le soltaba.
- Si hay otro problema, con pulsar este botón – señaló a la pared donde se encontraban diferentes botones y algunos enchufes – es suficiente – sonrió.
- Entiendo, gracias.
Se fueron.
- Eh, T, mírame – dije acercándome de nuevo – no sé por qué no quieres que te atiendan, pero hazme caso, te hará bien. Ellos te cuidarán.
Él me miraba a los ojos y negaba con la cabeza.
- Si, solo aguanta un poco, ¿vale? En cuanto mejores, te dejarán irte.
T se dio la vuelta, dándome la espalda, y enterró la cabeza en la almohada.
Le escuché sollozar.
Hasta aquí este capítulo~
Espero que lo hayáis disfrutado muchísimo!
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