Esa misma noche la familia Spencer preparaba una fiesta, un invitado que ellos aseguraban era importante iba a venir y querían que todo esté perfecto. Olivia enredada en una bata de baño seleccionaba uno de sus vestidos. Podía seleccionar uno de color n***o con caída de sirena o uno rojo donde sus piernas eran la mayor atracción. TOC, TOC Tocaron a su puerta. - Tengo estos vestidos para ti. – dijo Andrea con tres prendas en sus manos. – son de anteaño, pero a ti no debe de importarte eso. Después de todo, debes de agradecerme por utilizar vestidos tan elegantes, ya que tus topas son de mal gusto y poco estilo. Olivia atornilló los ojos con los de ella a la vez que levantaba las cejas. Andrea no paraba de menospreciarla y Olivia no estaba para armar una plática y dejarla en su luga