he conseguido de todo gracias a mi belleza desde comida, un auto, hasta un departamento, llevo una vida llena de comodidades sin hacer nada, por mi vida han pasado varios hombres que se han enamorado perdidamente de mi, que me han pedido matrimonio pero yo no siento nada por ellos, es como si mi corazón no estuviese diseñado para amar, ni siquiera recuerdo si alguna vez me gustó en verdad un hombre, no recuerdo nunca haberme emocionado por alguien y nunca sentí remordimiento por usarlos, lo único real que tengo en mi vida es mi carrera de enfermería
ya me falta solo unos meses para graduarme de la universidad me gusta mucho lo que hago y en verdad soy muy buena, soy la mejor de la clases aunque todos piensan que es porque me acuesto con mis profesores
todas mis compañeras me odia y me tienen envidia y como no, si en verdad soy muy sexy y atractiva pero con lo referente a mi trabajo soy muy seria y eficiente, un día el decano de mi escuela me manda a llamar voy para ver de qué se trata
- buen día señor decano me mando a llamar
- buen día señorita Evans por respeto al tiempo seré directo ud es la mejor estudiante de su promoción por lo que han decidido darle una beca para que se especialice en rehabilitación física una vez que termine su licenciatura en enfermería
- dios estoy muy feliz le agradezco infinitamente no lo decepcionaré señor
- solo hay un inconveniente la beca es en la universidad de Manchester la beca cubre todo lo referente al estudio pero no cubre la manutención así que si acepta tendrá que buscar la manera de vivir allá
ir a otro país, pero este es mi hogar, pero si lo pienso bien aquí no tengo nada ni a nadie solo ya fila de hombres que no me interesan y otra fila de mujeres que me odian y la verdad ya estoy cansada de eso, quiero tener una vida nueva quiero empezar de cero y está es mi oportunidad, creo que Manchester no se oye mal después de todo
- no se preocupe señor trabajaré y estudiaré seré la mejor no le haré quedar mal
- muy bien Sahara así se habla haré todos los papeles para cuando termines de estudiar viajes inmediatamente
le agradezco salgo del decanato y no puedo creer lo que está pasando tengo la oportunidad de empezar de nuevo en un nuevo lugar y dejar toda mi vida atrás, todos eses recuerdos horribles que me persiguieron por años, el tiempo pasa volando y pronto ya estoy alistando mi maleta para viajar, sin tener de quién despedirme llegó a Manchester
tengo un poco de dinero ahorrado que eso me ayudara a vivir un par de meses pero necesito encontrar un empleo y rápido
alquilo un pequeño dormitorio para estudiante la verdad es un basurero pero es barato y queda muy cerca del hospital donde estoy estudiando, ya estoy haciendo las prácticas en el hospital y tengo a muchos de mis profesores impresionados por mis capacidades y por mi belleza
- señorita Evans
- Si doctor dígame
- me enteré que esta buscando trabajo la recomendé con un conocido mío este pendiente de su celular que la llamarán pronto, no me haga quedar mal ok
- no se preocupe doctor seré la mejor en todo no le haré quedar mal y muchas gracia
esa misma noche se ponen en contacto conmigo me dan una dirección y me piden que esté ahí a las 8 voy al siguiente día y el lugar es una mansión como las de las películas de las que toca llegar en auto desde la reja hasta la entrada principal, al llegar una señora vestida con la típica vestimenta de sirvienta de traje n***o y mandil blanco de encajes me espera en la puerta, me rio para mí pensado que esto es un verdadero cliché
-por aquí señorita Evans el señor York la está esperando
-gracias- respondo si salir aun de mi asombro por la mansión
entro a una oficina es muy grande y elegante y veo a un hombre sentado en su escritorio es un hombre muy apuesto parece un rey su cabello y barbas ya tienen algunas canas pero eso le da un aire sofisticado y de madurez es alto y tiene un cuerpo esbelto, dios ahora entiendo porque a las mujeres les gustan mayores, nunca me había impresionado así un hombre
- buen día señor York soy Saha...
- señorita Evans sé quién es ud así que tome asiento por favor la mandé a llamar porque quiero indicarle algunas cosas antes de que inicie con sus actividades, la persona a la que ud va a cuidar no es una persona común se trata de mi hijo Demian y tiene 25 años y está así desde los 22 por un fatídico accidente, Demian es algo difícil y caprichoso pero no es malo, el es así por su condición y es entendible, así que tenga algo de paciencia, y a más de cuidar a mi hijo sus funciones están en convencerlo en que haga terapia física y por amor a dios que salga de su habitación a tomar un poco de aire y sol y es por eso que ud está aquí, la contraté porque a parte de tener los conocimientos de enfermería y rehabilitación física ud es una mujer con- hace una pausa- con buenos atributos físicos y supongo que eso lo motivará por no decirlo de otra manera a salir de su cama ahhh otra cosa más, no creo que sea necesario pedir su total discreción señorita Evans estamos de acuerdo
en ese momento sin darme tiempo a procesar todo lo que me dijo y sin poder salir de la impresión que me dejó este hombre entra uno de sus abogados y me hace firmar el contrato de trabajo y un acuerdo de confidencialidad
- no señor no tiene que pedirmelo y haré mi mayor esfuerzo para no decepcionarlo
respondo un poco nerviosa ya que aún no logro reponerme de la impresión de ver al señor York
- muy bien no esperaría menos de ud ahora puede retirarse para iniciar su día Olivia le indicara el resto de la casa
salgo de la oficina y no puedo evitar sonreír por su acento es tan británico es hermoso y el muy atractivo es imposible no quedar cautivada
- señorita Evans tenga un poco de paciencia con el joven Demian el era un joven muy cariñoso, era atlético y muy apuesto debo añadir, tenía muchos amigos y mujeres que lo adoraban y también tenía a su madre que lo amaba y en un solo día lo perdió todo
- no se preocupe, entiendo perfectamente la situación, ya he trabajado con personas que han estado en la misma condición que el
comento con naturalidad, pero Olivia niega con la cabeza y antes de entrar se acerca a mi y susurra a mi oído
- le pido paciencia porque el joven Demian mmmm no se cómo explicarlo, se volvió alguien- guarda silencio- malo- arruga su nariz- no es que sea una mala persona, pero se porta mal con sus enfermeras a tal punto que la que más duro fue tres meses y cuando se fue lo hizo llorando- frunzo el ceño- porque cree que la paga es tan buena- comenta alzando sus cejas
ahora más que nunca tengo una verdad intriga por conocer a la supuesta reencarnación del anticristo
- Olivia llámame Sahara y no te preocupes por nada, se que nos vamos a llevar bien y te prometo que en poco tiempo el me va adorar- agrego sonriendo y con gran optimismo
- eso espero- sonrie- aunque debo reconocer que hay algo diferente en ti, algo que las demás no tenía, algo en tus ojos me dicen que vas a lograr lo que nadie a podido, tienes mi voto de confianza- toma mi mano y me da pequeñas palmaditas para darme ánimos
repiro profundamente y sonrió para atraer las buenas energías, no termino de poner el primer pie dentro de la habitación de Demian cuando escucho un grito que hace que salte del susto
- LARGATE NO TE QUIERO AQUI LARGATE NO NECESITO OTRA NIÑERA
Olivia no tardó ni un segundo en salir corriendo de ahi
- Olivia eres una cobarde
le gritó mientras miro como se aleja por el pasillo despavorida
- que te largues, que acaso eres sorda, o talvez eres tonta y no comprendes lo que digo
a la primera impresión debo reconocer que si es un hombre con un rostro muy atractivo, tiene el cabello castaño claro casi rubio, está despeinado pero eso solo lo hace lucir rebelde y relajado y Díos santo tiene unos ojos celestes como el cielo cuando está despejado y radiante una nariz perfilada y delgada, unos labios muy bien formados y de un color rosado natural que muy pocas personas puedes ostentar y a segunda impresión... pues si, creo que es el anticristo sus ojos transmiten una rabia incontrolable parece que tiene fuego dentro de ellos y me muestra los dientes como un perro rabioso, pero el no sabe con quién está tratando y eso no me va a intimidar
- de primera un buen día para ti también, otra cosa no!... no estoy sorda ni mucho menos soy tonta, así que no necesitas gritar ni hablarme así y la última y más importante adivina qué, tú no eres mi jefe, tu padre es el que me contrato así que puedes gritar todo lo que quieras pero mientras el me quiera aquí me voy a quedar y ahora que ya quedó todos los puntos aclarados mucho gusto soy Sahara Evans y no soy tu niñera soy tu enfermera