Pasamos el día los cuatro juntos en el mar, la alberca, el bar, Luis rentó un auto y por la tarde fuimos a conocer la población, en fin, no tiene caso detallar un día de diversión, ni quien por la noche en la suite lo comenzó, ni como lo comenzó, sabíamos a lo que íbamos y así lo hicimos. Jugábamos con las cartas en la terraza y al resultar ser yo la ganadora Juli me tomó de la mano y las dos entramos a su habitación, ahí me pidió que me desnudara pero ella no lo hizo, me cubrió los ojos con una pañoleta y sobre de ésta puso un antifaz, me llevó a la cama hasta quedar acostada boca arriba, con las piernas dobladas y las plantas de mis pies apoyadas sobre la sábana en la orilla de la cama y me dijo. —Voy a apagar la luz, pase lo que pase no te puedes mover hasta que yo venga por ti, fuist