5 Charlie Maldita Larkin, pienso yo, sacudiéndome y volteándome en mi cama. Estoy entre dormido y despierto, justo al borde de quedarme dormido. Pienso en la noche de ayer. Estaba en la cocina, apoyado en el mostrador de una cocina que era casi, pero no igual a la mía, estaba cruzado de brazos. Miraba a Sarah, su cabello oscuro sobre su camiseta blanca de manga larga, sus manos regordetas tocando el pelo de los perros. Pero no es que haya ignorado a Larkin. ¿Cómo podría? Ella es obviamente una belleza, con su largo cabello rubio y sus encantadores ojos color caramelo. Sigo siendo un hombre con sangre y ella tiene una figura perfecta de reloj de arena. No soy inmune a sus encantos, eso es lo que digo. No me había olvidado de Britta. ¿Quién podría? Pero no estaba pensando en ella justo