Stiles
Regrese a casa después de conocer a Derek Hale, es el chico más apuesto del mundo, esos dientes de conejo y ceño fruncido me volvieron loco.
Mierda, soy su compañero, lo sentí desde el centro de mi pecho.
Al entrar Breaden fijó su mirada en mí a lo que yo hice un puchero.
- ¿Qué sucedió? - preguntó preocupada acercándose a mí sosteniendo mis mejillas con sus manos
- Esto se va a ir a la mierda - dije
- ¿Por qué? - dijo sentándome en un sofá
- Breaden son muy buenos chicos, son amables y me gusta estar con ellos y solo ha pasado un día y luego ese estúpido y glorioso Derek Hale, soy su compañero - dije soltando un suspiro cansado
Breaden me miró sorprendida pero luego acarició mi mejilla con cariño.
- Llamaré a Theo, Stiles debemos terminar esta misión. No los vas a matar, tu sigue normal, acércate y disfruta, Theo y yo nos encargaremos de todo - me dijo tranquilizándome
- Pero soy un mercenario tengo que cumplir con el trabajo - dije seriamente
- No, no lo harás. Stiles has vivido toda tu vida bajo estas reglas y créeme odio verte así, eres un chico maravilloso y amable, no es justo que te manches las manos, ya fue suficiente además no es la primera vez que dejas ir a alguien - me dijo divertida
Es verdad no es la primera vez que dejó ir a alguien, muchas veces los que me contratan son locos que odian a los sobrenaturales y quieren que los mate así que si son inocentes los dejó ir además las ventajas de haber matado a tantos y ser frío cuando mato es que nadie se mete conmigo solo Evan contradice lo que digo pero no puedo hacer nada.
Toda mi vida he sido un mercenario, solo conozco eso pero Breaden y Theo me han mostrado lo que es una vida normal, lo que es ser humano. Gracias a ellos pude darme cuenta que lo que hago no es lo correcto y lo odio; matar es una carga muy pesada, no he olvidado a todos los que he matado, es algo que siempre me va a perseguir.
- Stiles, vive tu vida, Theo llegará en una semana. Tenemos planeado algo para que Evan no te busque pero se necesita tiempo. Cuando te ganes al confianza de los lobos cuéntales todo - me dijo
- No, si voy a renunciar a esto no planeo decirles que soy un mercenario, desde ahora no mataré al menos de que amenacen a mi familia y la gente de este pueblo. No quiero que se enteren de quién soy en realidad, solo les mostraré mi mejor parte, no tienen que enterarse de mis demonios - le dije seriamente
- ¿Ni siquiera a Derek, tu compañero?
Él es el que menos quiero que sepa, jamás me había sentido tan atraído a alguien, quiero cuidarlo y estar a su lado, es un sentimiento que jamás había sentido y no quiero arruinarlo. No merecen saber que mis manos están manchadas de sangre, que soy el malo de la historia.
- Sobre todo él no se debe de enterar, nunca. Mostraré mis habilidades pero diré porque fui criado por un militar, lo cual no se aleja mucho de la verdad - le dije de manera seria a lo que ella soltó un suspiro
- No estoy de acuerdo pero es tu decisión y te apoyaré, iniciaremos de nuevo los tres, juntos - me dijo tomando mis manos entre las suyas
- Gracias - le dije esbozando una sonrisa y besar su mejilla
Me levanté para dirigirme a la cocina y preparar algo para comer.
- Ahora aclarado todo, ¿cómo estuvo tu primer día? - me preguntó
- Excelente, los chico son muy agradables y simpático. Definitivamente odio las clases son aburridas y al parecer hay un profesor que me odia y apenas es mi primer día aquí, ya estamos a mitad del año y la mayoría comenzó a pensar que va a hacer para el futuro, honestamente no quiero ir a la universidad tal vez me quede y pida trabajo en la comisaría, mis habilidades serían de ayuda - le dije tranquilo
- Ya te diré, iré después a la comisaría a pedir trabajo después de todo si me quedo aquí todo el día moriría de aburrimiento - me dijo divertida
- El regreso de la policía, me da gusto que empecemos de nuevo y cuando Theo llegué todo estará mejor - dije recordando a mi estúpido mejor amigo lobo
Stiles
Regrese a casa después de conocer a Derek Hale, es el chico más apuesto del mundo, esos dientes de conejo y ceño fruncido me volvieron loco.
Mierda, soy su compañero, lo sentí desde el centro de mi pecho.
Al entrar Breaden fijó su mirada en mí a lo que yo hice un puchero.
- ¿Qué sucedió? - preguntó preocupada acercándose a mí sosteniendo mis mejillas con sus manos
- Esto se va a ir a la mierda - dije
- ¿Por qué? - dijo sentándome en un sofá
- Breaden son muy buenos chicos, son amables y me gusta estar con ellos y solo ha pasado un día y luego ese estúpido y glorioso Derek Hale, soy su compañero - dije soltando un suspiro cansado
Breaden me miró sorprendida pero luego acarició mi mejilla con cariño.
- Llamaré a Theo, Stiles debemos terminar esta misión. No los vas a matar, tu sigue normal, acércate y disfruta, Theo y yo nos encargaremos de todo - me dijo tranquilizándome
- Pero soy un mercenario tengo que cumplir con el trabajo - dije seriamente
- No, no lo harás. Stiles has vivido toda tu vida bajo estas reglas y créeme odio verte así, eres un chico maravilloso y amable, no es justo que te manches las manos, ya fue suficiente además no es la primera vez que dejas ir a alguien - me dijo divertida
Es verdad no es la primera vez que dejó ir a alguien, muchas veces los que me contratan son locos que odian a los sobrenaturales y quieren que los mate así que si son inocentes los dejó ir además las ventajas de haber matado a tantos y ser frío cuando mato es que nadie se mete conmigo solo Evan contradice lo que digo pero no puedo hacer nada.
Toda mi vida he sido un mercenario, solo conozco eso pero Breaden y Theo me han mostrado lo que es una vida normal, lo que es ser humano. Gracias a ellos pude darme cuenta que lo que hago no es lo correcto y lo odio; matar es una carga muy pesada, no he olvidado a todos los que he matado, es algo que siempre me va a perseguir.
- Stiles, vive tu vida, Theo llegará en una semana. Tenemos planeado algo para que Evan no te busque pero se necesita tiempo. Cuando te ganes al confianza de los lobos cuéntales todo - me dijo
- No, si voy a renunciar a esto no planeo decirles que soy un mercenario, desde ahora no mataré al menos de que amenacen a mi familia y la gente de este pueblo. No quiero que se enteren de quién soy en realidad, solo les mostraré mi mejor parte, no tienen que enterarse de mis demonios - le dije seriamente
- ¿Ni siquiera a Derek, tu compañero?
Él es el que menos quiero que sepa, jamás me había sentido tan atraído a alguien, quiero cuidarlo y estar a su lado, es un sentimiento que jamás había sentido y no quiero arruinarlo. No merecen saber que mis manos están manchadas de sangre, que soy el malo de la historia.
- Sobre todo él no se debe de enterar, nunca. Mostraré mis habilidades pero diré porque fui criado por un militar, lo cual no se aleja mucho de la verdad - le dije de manera seria a lo que ella soltó un suspiro
- No estoy de acuerdo pero es tu decisión y te apoyaré, iniciaremos de nuevo los tres, juntos - me dijo tomando mis manos entre las suyas
- Gracias - le dije esbozando una sonrisa y besar su mejilla
Me levanté para dirigirme a la cocina y preparar algo para comer.
- Ahora aclarado todo, ¿cómo estuvo tu primer día? - me preguntó
- Excelente, los chico son muy agradables y simpático. Definitivamente odio las clases son aburridas y al parecer hay un profesor que me odia y apenas es mi primer día aquí, ya estamos a mitad del año y la mayoría comenzó a pensar que va a hacer para el futuro, honestamente no quiero ir a la universidad tal vez me quede y pida trabajo en la comisaría, mis habilidades serían de ayuda - le dije tranquilo
- Ya te diré, iré después a la comisaría a pedir trabajo después de todo si me quedo aquí todo el día moriría de aburrimiento - me dijo divertida
- El regreso de la policía, me da gusto que empecemos de nuevo y cuando Theo llegué todo estará mejor - dije recordando a mi estúpido mejor amigo lobo
Stiles
Regrese a casa después de conocer a Derek Hale, es el chico más apuesto del mundo, esos dientes de conejo y ceño fruncido me volvieron loco.
Mierda, soy su compañero, lo sentí desde el centro de mi pecho.
Al entrar Breaden fijó su mirada en mí a lo que yo hice un puchero.
- ¿Qué sucedió? - preguntó preocupada acercándose a mí sosteniendo mis mejillas con sus manos
- Esto se va a ir a la mierda - dije
- ¿Por qué? - dijo sentándome en un sofá
- Breaden son muy buenos chicos, son amables y me gusta estar con ellos y solo ha pasado un día y luego ese estúpido y glorioso Derek Hale, soy su compañero - dije soltando un suspiro cansado
Breaden me miró sorprendida pero luego acarició mi mejilla con cariño.
- Llamaré a Theo, Stiles debemos terminar esta misión. No los vas a matar, tu sigue normal, acércate y disfruta, Theo y yo nos encargaremos de todo - me dijo tranquilizándome
- Pero soy un mercenario tengo que cumplir con el trabajo - dije seriamente
- No, no lo harás. Stiles has vivido toda tu vida bajo estas reglas y créeme odio verte así, eres un chico maravilloso y amable, no es justo que te manches las manos, ya fue suficiente además no es la primera vez que dejas ir a alguien - me dijo divertida
Es verdad no es la primera vez que dejó ir a alguien, muchas veces los que me contratan son locos que odian a los sobrenaturales y quieren que los mate así que si son inocentes los dejó ir además las ventajas de haber matado a tantos y ser frío cuando mato es que nadie se mete conmigo solo Evan contradice lo que digo pero no puedo hacer nada.
Toda mi vida he sido un mercenario, solo conozco eso pero Breaden y Theo me han mostrado lo que es una vida normal, lo que es ser humano. Gracias a ellos pude darme cuenta que lo que hago no es lo correcto y lo odio; matar es una carga muy pesada, no he olvidado a todos los que he matado, es algo que siempre me va a perseguir.
- Stiles, vive tu vida, Theo llegará en una semana. Tenemos planeado algo para que Evan no te busque pero se necesita tiempo. Cuando te ganes al confianza de los lobos cuéntales todo - me dijo
- No, si voy a renunciar a esto no planeo decirles que soy un mercenario, desde ahora no mataré al menos de que amenacen a mi familia y la gente de este pueblo. No quiero que se enteren de quién soy en realidad, solo les mostraré mi mejor parte, no tienen que enterarse de mis demonios - le dije seriamente
- ¿Ni siquiera a Derek, tu compañero?
Él es el que menos quiero que sepa, jamás me había sentido tan atraído a alguien, quiero cuidarlo y estar a su lado, es un sentimiento que jamás había sentido y no quiero arruinarlo. No merecen saber que mis manos están manchadas de sangre, que soy el malo de la historia.
- Sobre todo él no se debe de enterar, nunca. Mostraré mis habilidades pero diré porque fui criado por un militar, lo cual no se aleja mucho de la verdad - le dije de manera seria a lo que ella soltó un suspiro
- No estoy de acuerdo pero es tu decisión y te apoyaré, iniciaremos de nuevo los tres, juntos - me dijo tomando mis manos entre las suyas
- Gracias - le dije esbozando una sonrisa y besar su mejilla
Me levanté para dirigirme a la cocina y preparar algo para comer.
- Ahora aclarado todo, ¿cómo estuvo tu primer día? - me preguntó
- Excelente, los chico son muy agradables y simpático. Definitivamente odio las clases son aburridas y al parecer hay un profesor que me odia y apenas es mi primer día aquí, ya estamos a mitad del año y la mayoría comenzó a pensar que va a hacer para el futuro, honestamente no quiero ir a la universidad tal vez me quede y pida trabajo en la comisaría, mis habilidades serían de ayuda - le dije tranquilo
- Ya te diré, iré después a la comisaría a pedir trabajo después de todo si me quedo aquí todo el día moriría de aburrimiento - me dijo divertida
- El regreso de la policía, me da gusto que empecemos de nuevo y cuando Theo llegué todo estará mejor - dije recordando a mi estúpido mejor amigo lobo
Stiles
Regrese a casa después de conocer a Derek Hale, es el chico más apuesto del mundo, esos dientes de conejo y ceño fruncido me volvieron loco.
Mierda, soy su compañero, lo sentí desde el centro de mi pecho.
Al entrar Breaden fijó su mirada en mí a lo que yo hice un puchero.
- ¿Qué sucedió? - preguntó preocupada acercándose a mí sosteniendo mis mejillas con sus manos
- Esto se va a ir a la mierda - dije
- ¿Por qué? - dijo sentándome en un sofá
- Breaden son muy buenos chicos, son amables y me gusta estar con ellos y solo ha pasado un día y luego ese estúpido y glorioso Derek Hale, soy su compañero - dije soltando un suspiro cansado
Breaden me miró sorprendida pero luego acarició mi mejilla con cariño.
- Llamaré a Theo, Stiles debemos terminar esta misión. No los vas a matar, tu sigue normal, acércate y disfruta, Theo y yo nos encargaremos de todo - me dijo tranquilizándome
- Pero soy un mercenario tengo que cumplir con el trabajo - dije seriamente
- No, no lo harás. Stiles has vivido toda tu vida bajo estas reglas y créeme odio verte así, eres un chico maravilloso y amable, no es justo que te manches las manos, ya fue suficiente además no es la primera vez que dejas ir a alguien - me dijo divertida
Es verdad no es la primera vez que dejó ir a alguien, muchas veces los que me contratan son locos que odian a los sobrenaturales y quieren que los mate así que si son inocentes los dejó ir además las ventajas de haber matado a tantos y ser frío cuando mato es que nadie se mete conmigo solo Evan contradice lo que digo pero no puedo hacer nada.
Toda mi vida he sido un mercenario, solo conozco eso pero Breaden y Theo me han mostrado lo que es una vida normal, lo que es ser humano. Gracias a ellos pude darme cuenta que lo que hago no es lo correcto y lo odio; matar es una carga muy pesada, no he olvidado a todos los que he matado, es algo que siempre me va a perseguir.
- Stiles, vive tu vida, Theo llegará en una semana. Tenemos planeado algo para que Evan no te busque pero se necesita tiempo. Cuando te ganes al confianza de los lobos cuéntales todo - me dijo
- No, si voy a renunciar a esto no planeo decirles que soy un mercenario, desde ahora no mataré al menos de que amenacen a mi familia y la gente de este pueblo. No quiero que se enteren de quién soy en realidad, solo les mostraré mi mejor parte, no tienen que enterarse de mis demonios - le dije seriamente
- ¿Ni siquiera a Derek, tu compañero?
Él es el que menos quiero que sepa, jamás me había sentido tan atraído a alguien, quiero cuidarlo y estar a su lado, es un sentimiento que jamás había sentido y no quiero arruinarlo. No merecen saber que mis manos están manchadas de sangre, que soy el malo de la historia.
- Sobre todo él no se debe de enterar, nunca. Mostraré mis habilidades pero diré porque fui criado por un militar, lo cual no se aleja mucho de la verdad - le dije de manera seria a lo que ella soltó un suspiro
- No estoy de acuerdo pero es tu decisión y te apoyaré, iniciaremos de nuevo los tres, juntos - me dijo tomando mis manos entre las suyas
- Gracias - le dije esbozando una sonrisa y besar su mejilla
Me levanté para dirigirme a la cocina y preparar algo para comer.
- Ahora aclarado todo, ¿cómo estuvo tu primer día? - me preguntó
- Excelente, los chico son muy agradables y simpático. Definitivamente odio las clases son aburridas y al parecer hay un profesor que me odia y apenas es mi primer día aquí, ya estamos a mitad del año y la mayoría comenzó a pensar que va a hacer para el futuro, honestamente no quiero ir a la universidad tal vez me quede y pida trabajo en la comisaría, mis habilidades serían de ayuda - le dije tranquilo
- Ya te diré, iré después a la comisaría a pedir trabajo después de todo si me quedo aquí todo el día moriría de aburrimiento - me dijo divertida
- El regreso de la policía, me da gusto que empecemos de nuevo y cuando Theo llegué todo estará mejor - dije recordando a mi estúpido mejor amigo lobo
Stiles
Regrese a casa después de conocer a Derek Hale, es el chico más apuesto del mundo, esos dientes de conejo y ceño fruncido me volvieron loco.
Mierda, soy su compañero, lo sentí desde el centro de mi pecho.
Al entrar Breaden fijó su mirada en mí a lo que yo hice un puchero.
- ¿Qué sucedió? - preguntó preocupada acercándose a mí sosteniendo mis mejillas con sus manos
- Esto se va a ir a la mierda - dije
- ¿Por qué? - dijo sentándome en un sofá
- Breaden son muy buenos chicos, son amables y me gusta estar con ellos y solo ha pasado un día y luego ese estúpido y glorioso Derek Hale, soy su compañero - dije soltando un suspiro cansado
Breaden me miró sorprendida pero luego acarició mi mejilla con cariño.
- Llamaré a Theo, Stiles debemos terminar esta misión. No los vas a matar, tu sigue normal, acércate y disfruta, Theo y yo nos encargaremos de todo - me dijo tranquilizándome
- Pero soy un mercenario tengo que cumplir con el trabajo - dije seriamente
- No, no lo harás. Stiles has vivido toda tu vida bajo estas reglas y créeme odio verte así, eres un chico maravilloso y amable, no es justo que te manches las manos, ya fue suficiente además no es la primera vez que dejas ir a alguien - me dijo divertida
Es verdad no es la primera vez que dejó ir a alguien, muchas veces los que me contratan son locos que odian a los sobrenaturales y quieren que los mate así que si son inocentes los dejó ir además las ventajas de haber matado a tantos y ser frío cuando mato es que nadie se mete conmigo solo Evan contradice lo que digo pero no puedo hacer nada.
Toda mi vida he sido un mercenario, solo conozco eso pero Breaden y Theo me han mostrado lo que es una vida normal, lo que es ser humano. Gracias a ellos pude darme cuenta que lo que hago no es lo correcto y lo odio; matar es una carga muy pesada, no he olvidado a todos los que he matado, es algo que siempre me va a perseguir.
- Stiles, vive tu vida, Theo llegará en una semana. Tenemos planeado algo para que Evan no te busque pero se necesita tiempo. Cuando te ganes al confianza de los lobos cuéntales todo - me dijo
- No, si voy a renunciar a esto no planeo decirles que soy un mercenario, desde ahora no mataré al menos de que amenacen a mi familia y la gente de este pueblo. No quiero que se enteren de quién soy en realidad, solo les mostraré mi mejor parte, no tienen que enterarse de mis demonios - le dije seriamente
- ¿Ni siquiera a Derek, tu compañero?
Él es el que menos quiero que sepa, jamás me había sentido tan atraído a alguien, quiero cuidarlo y estar a su lado, es un sentimiento que jamás había sentido y no quiero arruinarlo. No merecen saber que mis manos están manchadas de sangre, que soy el malo de la historia.
- Sobre todo él no se debe de enterar, nunca. Mostraré mis habilidades pero diré porque fui criado por un militar, lo cual no se aleja mucho de la verdad - le dije de manera seria a lo que ella soltó un suspiro
- No estoy de acuerdo pero es tu decisión y te apoyaré, iniciaremos de nuevo los tres, juntos - me dijo tomando mis manos entre las suyas
- Gracias - le dije esbozando una sonrisa y besar su mejilla
Me levanté para dirigirme a la cocina y preparar algo para comer.
- Ahora aclarado todo, ¿cómo estuvo tu primer día? - me preguntó
- Excelente, los chico son muy agradables y simpático. Definitivamente odio las clases son aburridas y al parecer hay un profesor que me odia y apenas es mi primer día aquí, ya estamos a mitad del año y la mayoría comenzó a pensar que va a hacer para el futuro, honestamente no quiero ir a la universidad tal vez me quede y pida trabajo en la comisaría, mis habilidades serían de ayuda - le dije tranquilo
- Ya te diré, iré después a la comisaría a pedir trabajo después de todo si me quedo aquí todo el día moriría de aburrimiento - me dijo divertida
- El regreso de la policía, me da gusto que empecemos de nuevo y cuando Theo llegué todo estará mejor - dije recordando a mi estúpido mejor amigo lobo
Stiles
Regrese a casa después de conocer a Derek Hale, es el chico más apuesto del mundo, esos dientes de conejo y ceño fruncido me volvieron loco.
Mierda, soy su compañero, lo sentí desde el centro de mi pecho.
Al entrar Breaden fijó su mirada en mí a lo que yo hice un puchero.
- ¿Qué sucedió? - preguntó preocupada acercándose a mí sosteniendo mis mejillas con sus manos
- Esto se va a ir a la mierda - dije
- ¿Por qué? - dijo sentándome en un sofá
- Breaden son muy buenos chicos, son amables y me gusta estar con ellos y solo ha pasado un día y luego ese estúpido y glorioso Derek Hale, soy su compañero - dije soltando un suspiro cansado
Breaden me miró sorprendida pero luego acarició mi mejilla con cariño.
- Llamaré a Theo, Stiles debemos terminar esta misión. No los vas a matar, tu sigue normal, acércate y disfruta, Theo y yo nos encargaremos de todo - me dijo tranquilizándome
- Pero soy un mercenario tengo que cumplir con el trabajo - dije seriamente
- No, no lo harás. Stiles has vivido toda tu vida bajo estas reglas y créeme odio verte así, eres un chico maravilloso y amable, no es justo que te manches las manos, ya fue suficiente además no es la primera vez que dejas ir a alguien - me dijo divertida
Es verdad no es la primera vez que dejó ir a alguien, muchas veces los que me contratan son locos que odian a los sobrenaturales y quieren que los mate así que si son inocentes los dejó ir además las ventajas de haber matado a tantos y ser frío cuando mato es que nadie se mete conmigo solo Evan contradice lo que digo pero no puedo hacer nada.
Toda mi vida he sido un mercenario, solo conozco eso pero Breaden y Theo me han mostrado lo que es una vida normal, lo que es ser humano. Gracias a ellos pude darme cuenta que lo que hago no es lo correcto y lo odio; matar es una carga muy pesada, no he olvidado a todos los que he matado, es algo que siempre me va a perseguir.
- Stiles, vive tu vida, Theo llegará en una semana. Tenemos planeado algo para que Evan no te busque pero se necesita tiempo. Cuando te ganes al confianza de los lobos cuéntales todo - me dijo
- No, si voy a renunciar a esto no planeo decirles que soy un mercenario, desde ahora no mataré al menos de que amenacen a mi familia y la gente de este pueblo. No quiero que se enteren de quién soy en realidad, solo les mostraré mi mejor parte, no tienen que enterarse de mis demonios - le dije seriamente
- ¿Ni siquiera a Derek, tu compañero?
Él es el que menos quiero que sepa, jamás me había sentido tan atraído a alguien, quiero cuidarlo y estar a su lado, es un sentimiento que jamás había sentido y no quiero arruinarlo. No merecen saber que mis manos están manchadas de sangre, que soy el malo de la historia.
- Sobre todo él no se debe de enterar, nunca. Mostraré mis habilidades pero diré porque fui criado por un militar, lo cual no se aleja mucho de la verdad - le dije de manera seria a lo que ella soltó un suspiro
- No estoy de acuerdo pero es tu decisión y te apoyaré, iniciaremos de nuevo los tres, juntos - me dijo tomando mis manos entre las suyas
- Gracias - le dije esbozando una sonrisa y besar su mejilla
Me levanté para dirigirme a la cocina y preparar algo para comer.
- Ahora aclarado todo, ¿cómo estuvo tu primer día? - me preguntó
- Excelente, los chico son muy agradables y simpático. Definitivamente odio las clases son aburridas y al parecer hay un profesor que me odia y apenas es mi primer día aquí, ya estamos a mitad del año y la mayoría comenzó a pensar que va a hacer para el futuro, honestamente no quiero ir a la universidad tal vez me quede y pida trabajo en la comisaría, mis habilidades serían de ayuda - le dije tranquilo
- Ya te diré, iré después a la comisaría a pedir trabajo después de todo si me quedo aquí todo el día moriría de aburrimiento - me dijo divertida
- El regreso de la policía, me da gusto que empecemos de nuevo y cuando Theo llegué todo estará mejor - dije recordando a mi estúpido mejor amigo lobo
Stiles
Regrese a casa después de conocer a Derek Hale, es el chico más apuesto del mundo, esos dientes de conejo y ceño fruncido me volvieron loco.
Mierda, soy su compañero, lo sentí desde el centro de mi pecho.
Al entrar Breaden fijó su mirada en mí a lo que yo hice un puchero.
- ¿Qué sucedió? - preguntó preocupada acercándose a mí sosteniendo mis mejillas con sus manos
- Esto se va a ir a la mierda - dije
- ¿Por qué? - dijo sentándome en un sofá
- Breaden son muy buenos chicos, son amables y me gusta estar con ellos y solo ha pasado un día y luego ese estúpido y glorioso Derek Hale, soy su compañero - dije soltando un suspiro cansado
Breaden me miró sorprendida pero luego acarició mi mejilla con cariño.
- Llamaré a Theo, Stiles debemos terminar esta misión. No los vas a matar, tu sigue normal, acércate y disfruta, Theo y yo nos encargaremos de todo - me dijo tranquilizándome
- Pero soy un mercenario tengo que cumplir con el trabajo - dije seriamente
- No, no lo harás. Stiles has vivido toda tu vida bajo estas reglas y créeme odio verte así, eres un chico maravilloso y amable, no es justo que te manches las manos, ya fue suficiente además no es la primera vez que dejas ir a alguien - me dijo divertida
Es verdad no es la primera vez que dejó ir a alguien, muchas veces los que me contratan son locos que odian a los sobrenaturales y quieren que los mate así que si son inocentes los dejó ir además las ventajas de haber matado a tantos y ser frío cuando mato es que nadie se mete conmigo solo Evan contradice lo que digo pero no puedo hacer nada.
Toda mi vida he sido un mercenario, solo conozco eso pero Breaden y Theo me han mostrado lo que es una vida normal, lo que es ser humano. Gracias a ellos pude darme cuenta que lo que hago no es lo correcto y lo odio; matar es una carga muy pesada, no he olvidado a todos los que he matado, es algo que siempre me va a perseguir.
- Stiles, vive tu vida, Theo llegará en una semana. Tenemos planeado algo para que Evan no te busque pero se necesita tiempo. Cuando te ganes al