Punto de vista de Travis —Así que Brooke piensa que eres tan tonto como realmente eres, ¿eh?— Izan me preguntó. —Cállate, tú tampoco eres exactamente el epítome de lo genial— le disparó Clara. —Gracias, Clara— me reí, metiéndome un trozo de bistec en la boca. Se rió de Izan mientras él fingía hacer un puchero y yo negué con la cabeza. —Clara…— se quejó. Ella le lanzó una mirada sensata y él se calmó, no queriendo molestarla. No podía decir que lo culpaba. —Menos mal que ella cocina. Esa es la única razón por la que los dejé venir— dije. Era domingo y había traído a Clara para que cocinara en mi parrilla que rara vez usaba en la terraza trasera. Había encontrado una manera de preparar carne de venado que era bastante buena, y estábamos dispuestos a dejar que nos preparara una comida.