—La noticia me cayó como balde de agua fría, enterarme de la posibilidad de ser padre me emociono, no entendía por qué mi corazón dolía, imagino que era por la estupidez que había cometido hace unos días, exactamente 21 días, ella se fue y no pude encontrar nada sobre su ida, me estaba volviendo loco, esto era común en las parejas destinadas, pero no en nosotros, yo la rechace y ella se cortó las glándulas, era imposible que fuera......
—¿Se puede?
—Pase señor Lafebvre
—¿Cómo se siente? Lo veo de mejor semblante
—Así parece señor Lafebvre, sin embrago, el dolor del alma nadie me lo quita
— ¿Me permite decirle unas palabras Andrews?
—Claro señor Lafebvre, usted es la única persona en quien puedo confiar
—Favor que usted me hace Alfa. Yo cometí el mismo error que usted a una edad similar, me deje envolver por una hermosa beta que decía amarme solo a mí, cuando andaba con media manada, rechace a mi omega destinada, como un iluso marque a una beta que ni siquiera le servía la marca de un alfa, cuando me entere o mejor dicho me dio la noticia que sería padre, fui el hombre más feliz del mundo, hasta que me volvió la lucidez a la mente ya era tarde, había rechazado y matado a mi omega con mi rechazo, ella me amaba de verdad, tuvimos una relación hermosa, hasta que esa beta me sedujo, no pude arreglar nada, ya el daño estaba hecho y yo desahuciado.
—No puedo creer lo que dijo, este hombre estaba muerto en vida. ¿Cree que me pasara lo mismo?
—Ya le paso Alfa, ya no puede volver atrás, además la joven desapareció, se fue y ella acepto su rechazo, prefirió convertirse en una simple humana a morir, es mejor que usted siga adelante
—Es fácil decirlo Lafebvre
—Me lo dice a mí. No es fácil, nada tiene de fácil, es lo más difícil del mundo, no tengo palabras para la agonía que esto provoca, sin poder morir hasta que vuelvan a renacer y puedan perdonarnos
—Lo lamento, olvide por un momento su problema, me senté en el filo de mi cama y trate de asimilar lo que me había contado, no podía creer que fui tan estúpido. ¿Dónde está Naomi con su familia?
—En la celda de la manada, al norte
—Llévame, necesito arreglar esto de una vez por todas
—Aún no está en condiciones Alfa
—No pedí tu opinión, serás mi mano derechas Lafebvre, pero no te permito que me contradigas, yo digo y tu obedeces ¿Entendido? El tonto, dulce y comprensible Andrews se murió, ahora llego el Alfa de la manada Silver
—Como usted ordene Alfa, haré los preparativos, enviare a alguien para que lo ayude a cambiarse
—Desde hoy cambiaremos todos los empleados de trabajan en la casa de la manada, no quiero a nadie del anterior Alfa, quiero betas o alfas, ni un solo omega puede quedarse, desde hoy viviré aquí, no regresare a mi departamento
—¿Esta seguro? Sus empresas ¿Quién las manejara?
—No te preocupes por nada que no sea la manada Lafebvre, solo sigue mis órdenes, yo pongo todo en orden
—Como usted diga Alfa ¿A quién le envió entonces?
—Busca a Muriel, es beta y mi mejor amigo, tengo que tener a personas de mi confianza a mi alrededor, por cierto Lafebvre, aun no me dice porque me ayudó
—El tiempo se lo dirá, pero si usted quiere saberlo puedo decírselo ahora mismo Alfa, si eso hace que confié en mi
—No, puedes decírmelo cuando te sientas seguro Lafebvre, no te obligare, te recomiendo no traicionarme o...........
—Tenga por seguro que no lo haré Alfa, mi presencia aquí era para ayudarlo y que no padezca lo que yo padecí y por ella, cuando pueda decirlo sin sentir que mi alma se parte, le contare porque regrese
—Vi el dolor de Lafebvre en sus ojos, este hombre de mirada fría ocultaba un dolor que lo sobrepasaba y yo no le regresaría los recuerdos de su pasado. Envía a Muriel y alista mi asunto, iremos a la celda donde se encuentran esos traicioneros
—Asentí, como ordene Alfa
—Lafebvre cumplió mis órdenes a cavalidad, Muriel no demoró en venir y molestarme
—Yo te lo dije desde que la conocí me pareció una vulgar beta que se mete por los pantalones de cualquiera o se sube a la cama del que mejor pague, pero como siempre te dejaste guiar por el corazón
—Puedes cerrar la boca Muriel o te regreso al cuchitril
— Tan sensible, dime princesa ¿Para que soy bueno? tu y yo no necesitamos este tipo de encuentros, nos conocemos demasiado
—Tengo un trabajo para ti Muriel, debes tratar con alma, corazón y vida lograrlo o me volveré loco, te necesito para mantenerme cuerdo
—Primero explícame que estupidez cometiste ahora, mírate como estas, es como si un tráiler te paso por encima
—Literalmente si lo fue y lo peor es que yo mismo traje ese tráiler hacia mi