Capítulo 15. ¿Dónde están las pruebas que hemos venido a trabajar?
Leandro salió de la oficina de seguridad furioso, sintiéndose más engañado que nunca. En ese momento no le interesaba si Andrea intentó engañarlo aquella noche, o si alguien estaba detrás de todo, lo único en lo que pensaba era que debía desquitarse, y si ella estaba dispuesta a acostarse con él, entonces no iba a ponerle trabas.
El abogado se olvido por un momento de sus años de reflexión y su muy mencionada y profunda frase donde recalca que nunca mezcla el trabajo con el placer, él se acerca a la barra y mira muy serio a Emilia, quien lo saluda con respeto como siempre que lo ha visto llegar al bar.
-- Buenas noches señor Coppola, ¿Qué le sirvo? – Leandro mueve la cabeza, él sigue observándola con desconfianza, sin
