Stepfanie, subió a su auto, se acomodó él vestido qué se levantó porqué era demasiado corto, estaba haciendo arrancar su auto, cuándo de pronto siente la vos de Maximiliano qué la llama por su nombre. —¡Espera Stephanie querida!, no te vallas. Ella sorprendida y enamorada, se bajó del auto y corrió a sus brazos, poco a poco fué acercando sus, labios los de ella, junto a él, él amor de su vida había vuelto, Maximiliano había recuperado la memoria. —Mi amor, ¡Te Amo! —Calla no digas nada, deja qué te acaricie y bese tus labios, eres mía, mi dulce y presiosa niña, me siento feliz de volver a estar contigo, mi vida no te vallas, te necesito tanto. Ellos se besaron, él le acarició él cabello, y besó sus manos qué eran suave, ella dejó que él la llenará de amor, se sentía plena al lado de