Testarudo Éste apareció por primera vez en GENERATION, 1972. Un cuento simple sobre la codicia al desnudo y las trivialidades astronómicas. Frederick von Burling Tercero, era un ratón de laboratorio. A los cinco años, el pequeño Frederick le preguntó a su mamá, “¿Me compras un estupendo cohete y un juego de astronauta?”. “No, Freddy”, dijo su mamá. “Cuesta $28,95. Sé un buen niño y no llores”. “Voy a llorar”, dijo el pequeño Frederick, zapateando sus pies furiosamente. “Voy a aguantar la respiración hasta que me ponga azul”. El pequeño Frederick hizo más que eso. Se puso morado. Ni que decir, chicos, que el pequeño Frederick obtuvo su estupendo cohete y su juego de astronauta. A los diez años, el pequeño Frederick le preguntó a su papá, “¿Me compras un poni vivo, leal y bondadoso?