Maratón 2/3 Pía Melina. Año Nuevo, uno de los días donde mayormente suelo estar sola con Valeria mientras está no tarda en terminar ligándose a cualquier holidate posible que calme su sensación de vacío... Al menos las anteriores eran así. Hoy en cambio; nos encontramos rodeado de personas ciertamente no deseadas, aunque otras que si se han ganado un lugar en mi corazón... Mencionando a esas personas no deseadas me refiero al castaño que no tarda en sonreír con malicia por cada paso que doy. —¿Acaso podrías dejar de ser tan borde y creído? Entrecierra sus ojos ignorando mis protestas apoyando su cuerpo en el marco de la puerta. —Solo si tu dejarás de ser tan dulce y buena. Se encoge de hombros al notar que es obvio no puedo dejar de ser algo que va conmigo desde que la vida me ob