"Gracias Gerardo, pero..."
Lily mira a su alrededor buscando a Mario por alguna parte...
O su auto, o su motocicleta, pero ella no puede encontrarlo.
"No importa lo que haya pasado con ese maldito hombre por la tarde, preciosa Lily."
"Puede golpearme todo lo que quiera, pero no desistire en demostrarte que mi amor por ti es verdadero."
Tal vez si Gerardo no luciera tan pervertido...
O su forma de hablar fuera escalofriante...
Tal vez la niña en verdad consideraría salir con ese hombre que le extiende el gran ramo de rosas rojas, la cuales huelen tan bien.
"Gerardo, muchas gracias por este regalo."
"No te hubieras molestado..."
La voz de Lily es triste, pero firme.
"Pero en cualquier momento llegará Mario, mi prometido por mi y no quiero que ustedes dos..."
"Bueno, no quiero que
