"Los Vengadores y la Hija de los Dioses."

CAPITULO 2 “Un paseo por el pasado”

(Enero 27, 2016; Nueva York, N.Y.)

(Ahmanet)

            El mundo ha cambiada, desde su aparición cada vez son más los que creen que pueden retarlos y derrotarlos, ilusos, que no comprenden que son seres especiales, nacidos para hacer cosas más grandes que ellos mismos, moldeados por sus propias circunstancias para ser lo que ahora son, los héroes más grandes del mundo, mejor conocidos como los vengadores, ahora mientras muchos los apoyan y admiran como lo que son, héroes, otros los culpan por no poder impedir que la desgracia llegue a sus vidas; es acaso que no comprenden que el mal está ahí afuera, y que por mucho que estos héroes traten de detenerlo, siempre habrá algún inocente que sufra por culpa de los criminales, sin importar que tan arduo luchen los vengadores por detenerlos.

            Ahora los tiempos cambian, aquellos que sufrieron por culpa de los criminales, exigen justicia, pero responsabilizan a los que tratan de luchar contra el mal y el crimen, ahora las naciones del mundo discuten el tratar de poner un freno y tomar el control de los vengadores, algo que preveo desastroso, más si el imbécil del General Ross, ahora secretario de Estado, intentara ser quien esté a cargo de los vengadores. Como permitir que un idiota que considera a un súper hombre como Hulk un arma a la cual manejar a su gusto, este a cargo de dirigir a los vengadores, aun no sé qué hacer para impedirlo, pero debo dejar al tiempo correr y que el destino se cumpla; pues yo Ahmanet Pequeña Nube Prince Goodnees, mejor conocida como “Ahmanet la etérea, la protectora del mundo, la guardiana de la vida y señora de la muerte” no puedo intervenir hasta no saber cuál es la verdadera amenaza para la humanidad.

            Aún falta mucho por recorrer, se quién soy yo quien se supone que fui, aun cuando he logrado la fusión de ambas, y sé que algo pasara, algo que me ayudara o me obligara a utilizar los poderes que me dio la fusión, sé que el mundo me necesita, y que yo lo necesito a él, pero como creerle?, como volver a confiar en él tras su desprecio?, sé que a veces nos vemos, y me duele tratarlo fríamente, más cuando lo amo, o eso creo, y a pesar del tiempo transcurrido y de que lo he manipulado para que rehaga su vida con otra, siempre vuelve a mi declarando que me ama y que hará todo lo necesario para convencerme de ello, pero como permitirle acercarse cuando me rechazo, al enterarse solo de una parte de quién soy? y ahora que casi he recorrido todo mi camino y estoy por unificar mis dos seres, el nuevo y el antiguo, como confiar en que él en verdad me aceptara como soy? o mejor dicho aceptara a quien soy y lo que antes fui.

Mi nombre real es Ahmanet Goodenking McNees, si es un nombre raro y antiguo, pero que quieren mis padres eran un profesor de arqueología y  mi madre una lingüista y traductora, tengo 18 años y estoy sola de desde la tierna edad de 8 años; en que mis propios padres me echaron a la calle pues me tenían mucho miedo, y más aún cuando sin desearlo cause la muerte de mi nana Alice Prince, y todo porque nunca me quisieron escuchar,  yo no soy una joven normal como cualquier otra, soy una m*****o fenómeno que causa la muerte por donde va. Pero también soy algo más, algo muy antiguo y poderoso y eso hasta a mí me da miedo aceptarlo

            Así es, el día de mi octavo cumpleaños, tras un exabrupto con mis padres que prefirieron salir a uno de sus tantos compromisos con la sociedad de arqueología que festejar el cumpleaños de su única hija, cause la muerte de la única persona que en realidad me ha querido, y como consecuencia ellos renegaron de mí, llamándome fenómeno y me echándome a la calle, sin importarles nada; desde ese momento he vivido en la calle, vagando sola por el mundo, durmiendo donde pudiera, en la copa de un árbol de central park, en un edificio abandonado, en una tienda de campaña, donde fuera.

Desde ese momento en que me vi abandonada a mi suerte, me he visto obligada a sobrevivir, y más que nada a tratar mis extrañas habilidades como forma de vida, he aprendido a controlar algunas pero trato de mantenerme en calma ya que otras aun a mí, me dan miedo.

Descubrí que el poder mover objetos con solo pensarlo, no era lo único que podía hacer, también puedo ir a donde yo quiera con solo desearlo, esta habilidad en especial me ha sido muy útil los últimos diez años, también descubrí que tengo una súper memoria, y lo recuerdo todo, absolutamente todo; investigue sobre mis habilidades y descubrí que a pesar de que no soy la única, si soy la única que las tiene al mismo tiempo; así que ya sé que mis rarezas tiene nombre, y son: telequinesis, teletransportación (aunque me gusta decir simplemente que salto de un lugar a otro),  y por ultimo memoria eidética; también tengo lo que algunos llaman memoria muscular, por lo que solo debo ver un movimiento para repetirlo a la perfección; sé que no es lo único que puedo hacer pues lo ciento dentro de mí; bullendo, tratando de salir, por lo que he tratado de aprender meditación a fin de mantenerme calmada, ya que si me altero o mi equilibrio se ve afectado, cosas horribles pueden pasar. Si aunamos a esto que mi coeficiente intelectual es de 238 bueno soy algo especial.

            Pero comencemos desde el principio por lo que creo debo contarles al menos algo de mí historia antes de este día.

(Enero 27, 1998; Boston, Massachusetts)

(Sra. Goodenking McNees)

-Felicidades es una niña- anuncia el medico en la sala de partos, siento que mi marido me abraza, mientras una enfermera deposita a mi recién nacida hija en mis brazos

-mira Max, es tan hermosa, tiene tus ojos grises. - digo tomando su manita

-si Helena, y tiene su cabello, castaño claro como el tuyo, de grande será toda una belleza lo sé -dice Max acariciándola en su pequeña cabecita

Debemos atender a la pequeña- anuncia una enfermera

-como la llamaran- pregunta el medico

-se llamara Ahmanet- le digo mirando a mi marido, a lo que Max asiente con la cabeza dándome un beso en la frente

(Ahmanet)

            Tengo frio, todo es muy brillante y ruidoso, quienes son estos seres, se ven extraños con esas cosas sobre sus caras, me llevan a algún lado; ah, eres tú, eres mi madre, y tú debes ser mi padre, por que lloran, acaso no me quieren, que sucede.

Mi madre hace ruidos, no entiendo lo que dice pero me observa y toma mi mano, se ve muy pequeña a lado de la suya, y mi padre también es ruidoso, pero me acaricia la cabeza, y me sonríe, veo que besa a mi madre en la frente, sé que me quieren. Alguien me levanta y me alejan, pero sé que regresare a lado de mis padres, esto solo es el comienzo.

(JUNIO, DEL 2001; BOSTON, MASSACHUSSETS)

(Ahmanet)

Tengo tres años y mi madre me ha llevado al parque a jugar, pero un niño grande me ha pegado por no darle el jugo de frutas que mi madre me dio, por lo que estoy llorando, ese niño vuelve a pegarme y yo grito, con lo que el niño sale volando hacia atrás, no sé qué paso, yo solo quería que me dejara en paz; tengo miedo por lo que corro a los brazos de mi madre, y le pido regresar a casa; ella no se opone.

Un hermoso perro n***o, alto y delgado con un collar de oro me observa y nos sigue de lejos, me gusta el perro, se lo señalo a mi madre pero ella no lo ve, a pesar de que está a solo unos metros de nosotras.

(Arqueólogo George Makepeace)

            Hace tres años que trabajamos en los artefactos y pergaminos encontrados en la tumba de la Etérea, la princesa Ahmanet, por lo que hemos logrado traducir tras tardar poco más de un año en clasificarlos y ordenarlos, el contenido de los pergaminos es la historia de la princesa, de su llegada a la  corte faraónica, de su crianza y educación en los distintos templos, hay dibujos de ella haciendo ofrendas a Isis, Basteth y Sejmeth, lo curioso es que dibujaron a un perro n***o con un collar de oro, podría ser Anubis, también la hemos encontrado dibujada sobre una barca viajando por el Nilo, y a su lado el mismo perro n***o.

            De lo poco que hemos logrado traducir de su historia es:

“Tras varios años de cruentas batallas contra los invasores, el faraón haciendo caso a sus consejeros, ha recorrido los templos de su reino, a fin de pedir a todos los dioses, su intervención para proteger a su pueblo, pues sufre no solo por la guerra, sino también por las plagas que esta desata.

La respuesta de los dioses no se dejó esperar, pues tras un día sin noche y una noche sin día (creo que se refieren a un eclipse total de sol), de los cielos traída por un rayo de sol, y depositada sobre las aguas del Nilo, apareció una pequeña barca dorada, jalada por dos grandes cocodrilos hasta las orillas del Nilo, y tras dejar la barca en las orillas, se internaron ambas bestias en las aguas del Nilo, el faraón fue avisado de este hecho y fue el mismo faraón quien descubrió el contenido de la barca dorada,  y ahí estaba una hermosa criatura, vertida del más fino lino y portando grandes joyas, dignas de una reina, junto a ella se encontraba una estatuilla de anubis el barquero y guardián del inframundo y un pergamino que solo contenía el nombre de la criatura y sus títulos reales. El faraón tomo a la criatura en sus brazos he hizo que su visir leyera el pergamino, tras esto el faraón anuncio:

            “Esta es Ahmanet, la etérea, hija de los dioses, protectora de Egipto y del Nilo, y de la vida sobre la tierra, de ahora en adelante será conocida como la princesa Ahmanet, una más de mis hijas, y será criada como tal, su educación ha sido decretada por los mismos dioses que la crearon, ella debe ser amada, protegida y adorada por todo Egipto.”

            Tras este anuncio, el faraón llevo a la criatura al palacio y la entrego a la reina, quien la crio como a su propia hija, anteponiéndola a sus propios hijos, la pequeña princesa creció, más hermosa cada vez, eclipsando a las mujeres más bellas del reino, con su belleza, su dulzura y su voz.  Al llegar el momento de su educación, el faraón ordeno que sacerdotes de los templos de Osiris, enviaran al más sabio de entre los suyos para enseñar a la princesa, lo mismo paso con los sacerdotes de los templos de Isis, Horus, Seth, Nebet Het, Toth, Basteth, Sejmeth y Hator.  Un sabio de cada templo educaba a la joven princesa, quien demostró tener la sabiduría de Toth;  los años pasaron y a pesar de que los invasores causaban problemas ya no eran las cruentas matanzas anteriores a la llegada de la princesa.

            Nadie osaba detener a la princesa y mucho menos tocarla, ella era la etérea, declarada inmaculada por el faraón, y a la edad de 10 años la joven princesa, demostró su gran poder,  pues emisarios de los invasores, llegaron a la corte del faraón y uno de ellos al verla la tomo en sus brazos, llevándola con él, al llegar frente al faraón, este exigió soltaran a la princesa, pues ella era la inmaculada, por lo que nadie podía tocarla, el emisario se rio, y elevando a la pequeña la beso en los labios, tras lo cual declaro “ella ya no es tu inmaculada, ella será mía, de ahora en adelante, parirá a mis hijos, pues tu reino dejara de existir si no te sometes, y yo como tributo la exijo a ella” la joven princesa solo dijo con su dulce voz: “tú no decides quien será mi marido, y mi padre no se someterá, pues aquí estoy yo, la etérea, hija de los dioses para proteger su reino” y tras lo cual desapareció de entre los brazos del invasor, reapareciendo a un lado de su padre, y con un movimiento de su mano la princesa elevo por los aires a los emisarios y diciendo: “ustedes y todos los suyos, morirán si al amanecer siguen en el reino de mi padre, pues yo soy la vida de Egipto, pero también soy la guerra y la muerte para los enemigos de Egipto, quedan advertidos” y con otro movimiento de la mano ellos desaparecieron.

            Cuando fue cuestionada por el faraón por el paradero de los emisarios, solo contesto “están entregando mi mensaje a su rey, padre, tendrás que ordenar que se guarden los granos, los ganados  y las conservas, que todo ciudadano se guarde de salir esta noche, que cierren puertas y ventanas, pues la muerte caminara por Egipto esta noche. Ellos vendrán pero no se irán” tras decir esto la joven princesa desapareció en una extraña nube de humo blanco, se le vio en una barca dorada en el centro del Nilo, acompañada por el perro que tanto la seguía, esta vez vestía de rojo, y portaba una espada en la mano y a la espalda un arco con sus flechas y una lanza en la otra mano. Era la Guerra encarnada.

            El faraón ordeno que todos los ciudadanos, siervos y esclavos se encerraran en sus casas, que cerraran puertas y ventanas, y que nadie saliera hasta que el sol brillara otra vez. Pues esa noche la diosa Sejmeth recorrería las calles clamando guerra y venganza, esta orden fue obedecida, y nadie se atrevió a asomar por las ventanas, los lamentos de muerte se escuchaban por todo el lugar, los aullidos de los chacales y los rugidos de los leones anunciaban que tanto Sejmeth como Anubis estaban presentes esa noche.

            A la mañana siguientes, eran cientos los cuerpos de los invasores los que yacían muertos, por toda la ciudad, y desde el palacio, el faraón vio a la princesa en su barca dorada, vestida de rojo y bañada en sangre y en sus manos había una espada ensangrentada y una lanza en cuya pica se encontraba la cabeza del rey invasor.  Egipto estaría en paz por varios años más.”

Traducir el contenido de los primeros papiros, nos ha llevado mucho tiempo, esperamos que los siguientes, se traduzcan mucho más rápido, entre los artefactos que encontramos, había arcones con joyas y ropas, cada arcón estaba señalado con uno de los nueve dioses, había también grandes depósitos de armas, espadas, lanzas, arcos y flechas, así como carros de batalla. Ahora comprendo el porqué de tantas armas en la tumba de una princesa. Ella no fue cualquier princesa, ella era una guerrera, una protectora.”