El ángel de Adriano

✔ 3. Ellos

✔ 3. Ellos:

Antonio Barese:

Hoy he pasado mucho tiempo hablando con Adriano, lo tengo como el hijo que nunca tuve. He estado involucrado en toda su vida, desde que su abuela se hizo cargo de su crianza con su madrina, cuando aún era un bebé.

Todavía tuve la oportunidad de recibir amor maternal, tuve a mi madre conmigo hasta el principio de mi adolescencia, pero un infarto masivo me la arrebató.

Vi a mi padre volver a casarse, con una mujer interesada, y de ese matrimonio gané una hermana, Gioconda, tan interesada como lo era su madre. Mi madrastra sólo dejó a mi padre sin nada, porque cuando cumplí dieciocho años, exigí la herencia que dejó mi madre. Quería administrarla yo misma, me había dado cuenta de la clase de mujer que era esa zorra*. Me daba rabia que mi padre fuera tan estúpido y no viera la serpiente que tenía al lado. Hice mi parte, le di una forma de descubrir que le habían traicionado delante de sus narices. La zorra se fue sin nada.

Trabajé duro, construyendo mi imperio, un imperio que le dejaré a Adriano. Te estarás preguntando por qué elegí a Adriano para ser mi heredero. Les digo que la respuesta es muy simple, lo quiero como a un hijo. Conozco su carácter, un hombre honorable. Está a mi lado no por mi dinero. También sé que tiene en mí la imagen de un padre.

Adriano Mancini:

Hoy en una conversación con el Sr. Antônio, lo encontré extraño, hablando de herencia. Parece saber que va a morir. Sobre su petición de hacer su última voluntad, no tiene que preocuparse por eso, yo nunca lo defraudé, y no será después de su muerte que lo haré. No sé lo que dejó preparado para su hermana y su sobrino, pero haré todo lo posible para que se respete su voluntad. Por supuesto, si estoy vivo, claro, cruzaré antes que él. Nunca se sabe lo que traerá el mañana.

Conozco bien a Gioconda, una mujer insufrible, arrogante, con esa mirada de superioridad y altanería.

Cuando dice que ella sólo quiere su dinero, por desgracia no dice tonterías, sé que junto con su hijo de mierda Fúlvio, hará lo que sea para meterle mano a todo lo que mi jefe ha acumulado durante todos estos años. De esa familia solo Fiorella se salva de verdad.

No puedo fallarle al hombre que fue mi única referencia como padre, que acogió a mi familia e invirtió en mí.

Es difícil de creer, pero siempre se preocupó de pagarme los estudios, estudié en las mejores escuelas, hice empresariales, un máster. Hoy trabajo con él en su bodega, soy su administrador. Me enseñó todo lo que necesitaba saber en la práctica.

Le estoy muy agradecido por todo lo que ha hecho por mí. Con su ayuda, ya he conseguido algunas cosas que quería, me he comprado mi piso, tengo mi coche. Sé que me falta un amor, sé que no es habitual que un hombre hable así, pero este es mi deseo.

Tengo treinta años y creo que ha llegado el momento de atar mi vida a alguien.

En este momento se queda ensimismado, recordando a la hermosa joven que vio hace unos días con Fiorella.

Flashback en:

_ Tu tío me pidió que te entregara este paquete.

_ El tío Antonio es todo un encanto.

Dijo con una sonrisa en los labios.

_ Angelina, mi tío ha enviado unas botellas de vino. Estoy segura de que te encantará.

_ Estoy segura de que me encantará. El vino que produce tu tío es el mejor del país.

Dijo Angelina con voz suave, y una leve sonrisa en su rostro.

_ Muchas gracias Adriano. Mándale recuerdos a mi tío, y dile que le echo de menos, y que en cuanto pueda iré a visitarle.

_ No hace falta que me lo agradezcas, lo haré encantado.

Me despedí y me fui. Pero desde aquel día, Angelina no ha abandonado mis pensamientos.

Es preciosa, sus ojos castaños brillan, su pelo es largo y castaño claro, sus labios son carnosos.

Como su nombre, es un ángel.

Flashback off.

Adriano sale de sus pensamientos.

_ ¡Adriano! Terra llamando a Adriano.

_ ¿Qué pasa, Lina?

_ Llevo un rato llamándote y estás en el mundo lunar. ¿Puedo preguntar en qué estabas pensando?

_ En nada.

_ Voy a fingir que te creo. He venido a invitarte a dar un paseo a caballo.

_ No me apetece.

He estado evitando a Lina, sé que está interesada en estar conmigo, pero no es recíproco por mi parte, la veo como una hermana, como una amiga.

Su madre es amiga de mi madrina, siempre han trabajado juntas para el señor Antonio.

Lina necesita conocer a otros hombres, perder esa fijación por tener algo más que una amistad.

...

Gracias por tomar un minuto de su tiempo para leer: "El ángel de Adriano".