Todas las miradas se dirigieron hacia ella, Sheryl pensó que la habían atrapado de nuevo. Rápidamente se puso seria y examinó la pregunta en la pizarra, por su parte Julia se regocijó desde un lado. Dudó que pudiera resolver este tipo de pregunta difícil, ya que sería muy extraño.
Inesperadamente, al segundo siguiente, Sheryl respondió la pregunta de forma ordenada analizándola por completo. Además, cada oración que dijo fue un punto clave para resolver el problema, y no hubo en absoluto detalles innecesarios. Toda la clase se sorprendió cuando vieron tal actuación, pensando: ¡Dios! ¿Es la hija de la familia rica que era ignorante e incompetente?
Incluso alguien con mejores resultados no era capaz de resolverlos, después de todo, esta difícil pregunta era una combinación de funcion
