—¡Cuéntalos! —ordena Vincent mientras lanza el latigazo número diez en la espalda de Axel. —¡Van diez, padre! —grita el chico que en ese instante tenía catorce años, él se encontraba de rodillas en una habitación que Vincent había dejado exclusivamente para hacer esos actos. —Bien… ¿entonces, no te vas a retractar? Mira que puedo seguir todo el día —amenaza Vincent, al instante que Axel se voltea diciendo: —¡No voy hacer tu voluntad, padre! ¡Odio a ese maldito profesor! Sus clases son una completa mierda, él esta equivocado, los elfos no son criaturas inferiores, somos especies con distintas virtudes y fortalezas, odio cuando dicen que los lobos somos superiores en todo, esa clase está mal, y ese profesor es una basura ¡Nunca me retractaré de lo que hice! —exclama el chico volteándose,