Ambos se separaron.
-ven -dijo Ethan tomándola de la mano para que la siga
-¿a dónde vamos?
-a un lugar que te regalará una increíble amnesia
Ambos llegan al lugar. Era un parque amplio, las hojas de otoño se esparcían por el césped y el camino de piedra.
-bien, aquí es
-es increíble, pero ¿cómo me regalará una increíble amnesia?
-porque estás conmigo, ven
-creído como siempre –murmuró
Ethan la lleva a rentar un par de bicicletas.
-¿una carrera? -dijo él
-¿qué, tenemos cinco años?
-vamos no seas aburrida -dijo acelerando
-oh ahora sí estas en problemas -dijo acelerando
-gané -dijo Ethan
-estás loco, yo gané
-no, yo gané
-yo, gane
-ahora sí parecemos niños de cinco años -dijo Ethan riendo a lo que Adriana rio también
