El fin de un amor no Correspondido

Capitulo 4

---Catherine. --- Su nombre salió con frialdad de los labios y el rostro de Lucian era de un aspecto sombrío.

La caja abierta de píldoras anticonceptivas que ella le arrojó hace unos meses le vino a la mente. La primera intuición es que Catherine volvió a engañarlo. Entonces le dijo con dureza.

---Eres una mentirosa. ¿Te atreves a mentirme? Esa posibilidad hizo que el rostro de Lucian fuera horriblemente feo.

---Lucian --- El alma de Catherine estaba tan herida, que no estaba dispuesta a aguantar un insulto mas. En este momento la miraba como en el pasado, como si ella fuera un insecto molesto.

Lastima, no lo volverá a permitir. Catherine sonrió con suficiencia. Un rayo de luz brilló en su hermoso rostro, brindandole una bonita sonrisa, sus ojos llenos de terquedad. Al mirar la cara de Lucian, ella opto por una expresion aburrida.

---¿Por qué estás enojado? Este niño no es tuyo.

El se quedo en silencio por un instante, luego entrecerró los ojos ligeramente, mirando, analizando, había una pizca de sospecha en su interior. Sus ojos recorrieron el estómago de Catherine --- ¿No es mío?

¿A quién le quiere mentir? ¿Cree que es tan fácil de engañarlo?

---Por supuesto, que no eres el padre. Después de nuestro divorcio, empecé una nueva relación y ya vez, dió frutos.

Los ojos de Lucian se estrecharon y la tormenta comenzó a formarse. Habia un sentimiento de molestia en su interior, sentimiento que no podia explicar. Apreto mas fuerte la mano de Catherine y esta dolía aún más, decidio que su corazón fuera cruel, ella tiró de su mano, mirándolo con desprecio --- Solo tengo seis meses de embarazo, el bebe en mi vientre, no puede ser tu hijo.

Alzo la voz un poco, y sonrió para verse feliz ---Este es el hijo de Sergio.

El la miro sin decir una palabra. Su mirada volvió recorrer el abdomen de ella, el grado de abultamiento era aproximadamente el mismo que el de Gianna, pero ella afirma estar embarazada de seis meses.

La oscuridad en su rostro se desvaneció un poco, pero al ver la felicidad en el rostro de Catherine, un rastro de incomodidad y desden se instaló en ellos.

Habia gritado muchas veces, lo mucho que lo ama, y ¿saltó a la cama de Sergio tan pronto como se divorció? Ahora que su embarazo es evidente, porque no escuchó a Sergio decir que se iba a casar.

Con un resoplido, sin mirarla, paso a su lado y camino hacia el baño.

No es que Catherine no sintiera la mirada de Lucian y supiera lo que pensaba de ella, pero no quería tener ningún contacto nuevamente con el.

Después de que su figura desapareció en la esquina, sintió que la fuerza de todo su cuerpo se había agotado y no podía moverse incluso para llegar a su mesa .El dolor y el calor de Lucian en su mano, aun permanecia alli.

La brutalidad que brilló en los ojos de Lucian era evidente y no pudo quedarse quieta, tenía que de alguna manera evitar que el matará al niño, pensando en la posibilidad de perder a su hijo se tambaleó. Un par de manos grandes sujetaron su cintura a tiempo.

Se congeló por un momento y volvió la cara para ver que era Marcus, no se dió cuenta cuando llegó y estaba parado detrás de ella.

---Hermana, vine a buscarte. Pero el camarero dijo que has estado en el baño durante mucho tiempo. ---Estoy bien --- Catherine negó con la cabeza --- Solo vamonos.

---¿Seguro, estás bien? No lo parece de ninguna manera. Tú, debes descansar cuando vuelvas a casa, le pedire a papa que no te de mas trabajo.

---Estoy bien, no te preocupes --- Catherine se adelanto. Marcus puso los ojos en blanco

--- Tengo que cuidarte, si algo te pasará a ti o al bebé Sergio acabaría conmigo. Así que vamos a casa.

Catherine no tuvo objeciones y camino aun mas rapido para irse. Lucian acaba de salir del baño en ese momento. Al escuchar la conversación entre las dos personas, su ojos se oscurecieron profundamente.

En realidad, su hijo es de Sergio.

Camino hasta la mesa donde esperaba su madre.

Sentada en el auto el corazón de Catherine latia rápido, al ver la mirada fría y oscura de Lucian, teme que el descubra la verdad, antes de que el niño nazca.

---¿Hermana? --- Marcus tomó su mano, mirando a Catherine, supo que algo andaba mal ---¿Qué te pasa? ¿Que paso en el cafe?

Ella negó con la cabeza, tratando de calmar los latidos excesivos de su corazón. Al sentir que el niño en el vientre la pateaba en ese momento, su rostro se puso un poco más pálido.

¿El niño también lo siente, siente que su padre lo odia?

Suavemente cubrió su abdomen con su mano, sintiendo el movimiento fetal, casi viendo al bebé pateando en su vientre.

Mi bebé……

---¿Hermana? --- El miró a Catherine, su apariencia era realmente anormal. Al descubrir que ella aún no había reaccionado, freno el auto y se detuvo a un lado de la carretera, estaba a punto de decir algo, pero sus ojos vieron a Lucian saliendo del estacionamiento del centro comercial.

No es de extrañar. Con la respuesta en su mente, Marcus no pudo evitar pensar, si no fuera por la buena relación entre las dos familias, al verlo intimidar a su hermana de esta manera, tendría la necesidad de golpearlo hasta la muerte. Ignorando la ira que se formaba en su interior, encendio el coche de nuevo y volvió junto a Catherine a casa.

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Cuando regreso a la mesa además de Brenda habia otras personas en el café, Lucian se quedó atónito por un momento, inmóvil.

Brenda vio la expresion de su hijo, se sintio un poco avergonzada y rápidamente extendió su mano e hizo un gesto a Lucian para que se sentara --- Hijo mío que coincidencia, la señora Rinaldi está aquí de compras también ven y saluda.

---Señora Rinaldi. --- Lucian se sentó junto a Brenda, su voz era indiferente, como si las personas que estaban con ellos no significará nada en especial.

--- Hola, realmente es una coincidencia --- la señora Rinaldi asintió con satisfacción cuando vio a Lucian y miró a Brenda --- Brenda, tienes suerte de que tu hijo sea muy considerado y saque tiempo para ir de compras contigo.

---Ohhhh, tu hija también es muy considerada.

Brenda fue elogiada por su hijo y estaba muy feliz al ver a Marta hablar con entusiasmo de Lucian.

---Lucian, esta es mi hija ... Natalia. --- La mujer que acababa de presentarle su madre, señalo a la chica del avion hace unos dias.

---Natalia, el es Lucian.

---Alcalde Landong, es bueno verle de nuevo.

Los labios de Natalia se levantaron con una leve sonrisa. Acercándose a él un poco dijo --- No esperaba que el destino fuera tan caprichoso.

Al mirar la sonrisa en su rostro, el extendió la mano sin expresión y la estrechó, sintiendo las puntas de sus dedos sobre su palma, frunciendo el ceño, rápidamente retiro su mano. Se sentó allí y tomó un sorbo de café.

---Pero... ¿Ustedes se conocen? --- Brenda notó los pequeños movimientos entre Natalia y Lucian, y toda la atención fue atraída por las palabras de Natalia.

---Ya conocía al Alcalde Landong --- explicó ella con una sonrisa --- Fui a Washington en un viaje de negocios hace unos días, y cuando regresé, estaba en el mismo avión que el alcalde.

---¿Enserio? Que gran coincidencia --- Brenda se veía muy feliz --- Ustedes dos, están realmente destinados.

---Sí, es el destino --- repitió Natalia, pero Brenda negó mirando a Natalia un poco molesta.

---¿Porque lo sigues llámando Alcalde Landong? Aquí no es necesario. Además, en New York el alcalde no es un funcionario. Simplemente, llámalo por su nombre.

Natalia no respondió, mirando el rostro indiferente de Lucian, mordiéndose ligeramente el labio inferior, su expresión dudó ---No creo que sea buena idea.

---No es nada malo, solo es un nombre.

Brenda miró a Natalia satisfecha.

La chica tiene un buen origen familiar y es muy hermosa, sería una buena candidata a esposa para mi hijo, además daría muchos nietos de genes adecuados para la familia.

Brenda se volvió para mirar a Lucian, realmente impotente, ante el rostro frío de su hijo --- Hijo, ¿puedes decir algo?

Lucian miró a Natalia, la chica tenia una mirada de ciervo asustado, asi que complacio a su insuperable madre y dijo.

---No me molesta que me llames por mi nombre.

---Gracias.... Lucian... --- Natalia era amable, con un toque de timidez en sus ojos. Brenda miró esta escena y sonrio muy feliz, guiñandole un ojo a la Sra. Rinaldi.

En ese instante, la madre de la chica dijo de repente.

---Oh, acabo de entrar y vi un nuevo estilo de joyería en la Tienda Tiffanys, Sra. Landong ¿me acompaña a ver los nuevos diseños?

---Si, si por supuesto --- Brenda la siguió, añadiendo --- Hablando de eso, mi sobrina y mi nuera compraron nuevos diseños.

---¿De verdad? Entonces vamos a ver. --- La Sra. Rinaldi ya se había levantado y caminaba hacia la salida. Natalia quería ponerse de pie, pero su madre hizo un gesto con la mano.

---Cariño, por favor acompaña a Lucian, nosotras iremos de compras y a ustedes los jóvenes les resultará aburrido.

---Vamonos.

---Vamos. --- Brenda temía que su hijo se arrepintiera, por lo que tomó a la Sra Rinaldi y se fue a toda velocidad.