Capítulo 92
La perra rompehogares
La débil voz de la mujer nos hizo girar la cabeza,
¡ni en mis sueños más salvajes me podría imaginar que se atrevería a ser tan descarada!
El aludido giró su cabeza, la miró sin cambiar su rostro y continúo hablando, como si ella no existiera.
Me sorprendí tanto con su forma de actuar que mi mente gritó histérica en ese momento
‘¿Ramiro acaba de tratar a su pequeño solecito como aire? Wooooooo, Samantha… ¡eres una perra malvada rompehogares!’
No pude evitar darle una mirada burlona a la mujer que, aunque parezca imposible, comenzó a verse mucho peor que hace un momento
Pero, como no podía dejar volar mi imaginación salvaje el resto de la noche cuando estoy rodeada de personas, la voz de Ramiro me trajo de regreso a la conversación.
“Yo realmente
