NARRA TIAGO
Mi madre sale de la habitación sonriendo. Yo me siento mucho más tranquilo que ella ya sabe de mis sentimientos por Luz. Ahora quiero saber que fue lo qué pasó entre Julián y ella. Mi teléfono suena ya se quien es pues quedamos de hablar.
—Hola Silvia. — le contestó algo seco.
—Hola Tiago, ¿podemos vernos? — me pregunta se escucha como si estuviera llorando.
—Si, dime a donde estás yo iré para allá. — le digo ella no me responde por un momento.
—Estoy en mi casa pero podríamos vernos en la bahía. — me dice.
—Si está bien ¿en una hora te parece bien? — le pregunto.
—Si te veo ahí. — y cuelga la llamada. Dejándome con la incertidumbre de ¿porque quiere verme? o en especial ¿para que? Salgo de mi habitación y rumbo a mi auto cuando veo a mi padre llegar hasta la puerta
