No sé qué me está pasando últimamente. Ando mucho más excitada de lo normal. Intentando buscar una explicación a esto se me ocurrió que tal vez se debía a que tuve que traer a mi mente numerosos recuerdos sexuales, o tal vez sea el haberme animado a revelarle detalles tan íntimos a mi terapeuta. Pero a esta opción la veo menos probable ya que si bien durante el momento en que le cuento las cosas siento cierta excitación, después de escribirlo se me pasa. ¡Hey! Tal vez sea por vos Ismael. No digo que vos me excites, pero sí me calienta mucho contarte todas esas anécdotas. Te cuento que me pasé toda la tarde mirando porno en internet. ¡No se lo digas a nadie porque te prendo fuego! Ya te había dicho que no suelo hacer estas cosas, pero hoy necesitaba algún estímulo visual extra. De por sí