Este efecto ya lo había sentido muchas veces, así que hace años decidí no seguir buscando una explicación racional al fenómeno y solo, me acuesto en posición fetal a la espera de que mágicamente, mi energía suba un poco en la mañana. Música suave suena al fondo, muchas parejas sin rostro danzan de manera monótona en una gran y ostentosa pista de baile y de la nada una figura masculina me toma de la mano y me arrastra a esa pista. Mi vestido es elegante y tan aburrido como el del resto de las mujeres, es largo, acartonado, pesado y agradezco al cielo no tener un espejo al frente, pues estoy segura de que también tengo un peinado alto y pomposo. Luego el paisaje cambia de la nada y estoy en una casa grande con un hermoso piso en mármol y al alcance de mi vista, está el lujoso juego de cub