Mmm, la maldita picazón en su zona baja no paraba y lo peor era que no podía rascarse en público, en casos como esos, Imer Palace deseaba ser una mujer. Ellas juntaban sus piernas y hacían fricción si su parte baja picaba y no había problema, pero el caso del hombre era realmente triste, hacían eso y lo único que sabían era que obtendrían huevos estrellados o picados. —¿Que pasa, alfa? —dijo su actual conquista con la cual tenía un trato por medio de sus familias, Laila era su nombre —. Te ves angustiado. La chica era de una familia refinada y era educada para tener etiqueta y todas clases de modales, sus padres la habían escogido para él, para que un día se casaran, tuvieran hijos, formaran una linda familia y juntos fueran los siguientes en la línea de sucesión por el derecho del lobo