LUKE
CAPÍTULO 13: PRESUNCIÓN DE DELITO
- Aquí tienen caballeros –
April nos sirve las bebidas que pedimos en el restaurante donde ella trabaja, como no nos hemos podido reunir en estos días en su casa porque ha estado ocupada con la universidad, ella nos invito a pasar por su trabajo.
- Aquí hay galletitas recién horneadas, cortesía de la casa – y claro, Colton encantó a la jefa de April – que las disfruten guapos -
- Gracias preciosa – Colton le guiña el ojo haciendo sonrojar a la señora quien se va dando una risita de colegiala, y todos nosotros, incluida April, ponemos nuestros ojos en blanco
- No tienes limites de edad hermanito – le dice Adolfo
- Coqueteando no, a quien llevo a la cama, es otra historia –
- Demasiada información – dice April haciendo una mueca - iré a atender mis otras mesas y en un ratito que es mi descanso, vuelvo –
- Eres tan linda cuando te sonrojas April, reconfortas mi corazón –
- Táchame de tu lista Colton –
Me rio de su interacción, si bien Colton es un coqueto, nunca les falta el respeto a las mujeres, al contrario, las defiende, y en este momento, creo que esta poniendo a April bajo su ala, ya que incluso escuche que le ha ayudado con algunas de sus materias, al parecer este pequeño mierda es un genio.
- ¿Han hablado con Laila últimamente? – la pregunta aleatoria al tema en discusión de parte de Adolfo me sorprende
- No – contestan sus hermanos, yo niego con mi cabeza
- Esta rara, algo le pasa –
- ¿Algo como qué? – pregunta Colton visiblemente preocupado
- No sé, pero la he visto nerviosa, le pregunte que tenia y me dijo que nada –
- Cuando Laila dice que es nada, pasa de todo – dice Finn
Oh, oh, pensé que era un mito cuando Oliver me lo contó, pero parece que los Latham se toman su papel de hermanos muy en serio, son observadores, les queda muy poco tiempo a mis amigos para soltar la noticia.
- ¿Algo para decirnos Luke? – me encara Adolfo
- Nada por este lado – respondo algo nervioso, él me alza una ceja – Oliver no me ha contado nada fuera de lo normal, no tengo más información que tú – miento descaradamente
Los tres entrecierran los ojos hacia mi y juro que siento como si estuviera siendo sometido a rayos x, trago saliva y empiezo a ponerme visiblemente nervioso.
- ¿Ven a lo que me refiero? – pregunta Adolfo
- Definitivamente algo pasa – dice Colton
- Esto amerita una intervención, si no suelta nada, tendremos que hacerle una visita a Walker – remata Finn
Mierda…
- Chicos, chicos, cálmense, sea lo que sea, no creo que sea malo, pero en cualquier caso dejen que lo arreglen entre ellos y cuando se sientan listos, dirán lo que es, a veces los matrimonios tienen secretos –
- Algo sabes Thompson – inquiere Finn
- Bien, si, algo sé – digo resignado – pero no se los diré a ustedes, tendrán que esperar a que ellos se lo digan –
- Palabras equivocadas – dice Colton
Inmediatamente Adolfo saca su celular, se levanta y sale del restaurante, claramente para llamar a Laila, mientras yo me quedo rodeado de sus hermanos que me siguen viendo peligrosamente.
- No es nada malo – digo dudando si decirles la verdad
- ¿Como es que tú sabes y nosotros no? – pregunta Colton
- ¿Me entere de casualidad? – suena más a pregunta y esto, obviamente me hace más sospechoso
Mierda, no es de extrañar que sean tan buenos abogados y letales cuando toman casos juntos, solo con sus miradas hacen que te pongas nervioso y quieras decir todo lo que les estas escondiendo.
- Me invitó a desayunar el sábado y que ese día me dirá, se los dije, algo grave pasa – dice Adolfo volviendo a la mesa
- Empieza a hablar Thompson – me ordena Finn
- Bueno chicos, tengo 20 minutos de descanso – April llega a nuestra mesa y agradezco en el alma la interrupción - ¿interrumpo algo? –
- Nada que no podamos retomar después preciosa – responde Colton rápidamente – ni creas que te vas a salvar Thompson -
- Déjame adivinar, ¿hablando de chicas? –
- Una en especial, eres muy intuitiva April –
April pone sus ojos en blanco y se ríe haciéndonos sonreír a todos, soltando un poco la tensión del momento, decido entrar en materia entes de que los Latham vuelvan a acorralarme, pero antes, aprovecho que los datos que le íbamos a mostrar a April están en mi celular y le envió un mensaje rápido a Oliver: SOS, hermanos Latham, modo sabueso activado.
Cierro la app de los mensajes y busco en mi correo electrónico, las imágenes mejoradas de las cámaras de seguridad que nos enviaron, tanto las de la casa de los Farrell como las de seguridad y tráfico que había en el expediente.
- Quiero que veas estas imágenes – le tiendo mi celular a April
Ella lo toma, lo aleja de su cara, luego lo acerca, pasa imagen a imagen, usa el zoom, hace caras y luego nos mira con un poco de enojo en sus ojos.
- ¿Estas imágenes estuvieron todo el tiempo en manos de las autoridades? –
- Algunas si – contesta Finn – ¿lo reconoces? –
- Sólo un idiota no lo haría – murmura haciendo una mueca con sus labios
- O alguien que haya sufrido de ceguera selectiva por el precio correcto – dice Colton
Ante esa observación el enojo de April se eleva notablemente, cierra los ojos y respira profundamente en un claro intento de calmarse, unos segundos después, nos mira y me devuelve el celular.
- Supongo que la misma persona que lo ayudaba cuando hicimos las denuncias por violencia intrafamiliar antes de que mamá muriera –
Esto no es noticia nueva para mí, cuando lleve su caso, ella me dio los radicados de las denuncias que había interpuesto antes contra su padrastro y todos estos, mágicamente, nunca habían entrado al sistema policial, pero la evidencia física en su cuerpo producto del último ataque por parte de su padrastro, no, y esta nueva denuncia no pudo ser encajonada.
- ¿Tienes idea de quién sea? – le pregunto
- No estoy segura, pero sé que él tenia a alguien en la policía que le debía favores, siempre se jactaba de eso cuando lo amenazamos de denunciarlo por sus abusos antes de que se fuera a Minnesota la primera vez, alguien de su pasado en el reformatorio donde se crio –
- ¿Ese fue el viaje que hizo que coincidió cuándo ocurrió el accidente? – pregunto, ella asiente
- April, ¿estas totalmente segura que es él? – pregunta Finn, ella asiente nuevamente – son imágenes de perfil y de lejos, la única que está de frente no se le ve la cara completa, claramente es el mismo hombre, pero ¿qué señales tiene que hace que lo reconozcas automáticamente? –
- Oh claro entiendo – ella asiente y me tiende su mano – para mí es fácil saber que es él porque estoy acostumbrada a verlo hasta en la sopa, pero supongo que sería bueno que ustedes supieran que buscar y como reconocerlo -
Le doy nuevamente mi celular y ella hace zoom en la primera foto donde se ve al hombre entrando a la casa de los Farrell, es una foto de frente, pero lleva una gorra, así que la cara solo se ve a la mitad, de la nariz hacia abajo.
- En esta es difícil reconocerlo a primera vista si no lo conoces para ser sincera, pero hay algo muy distintivo que reconocí, su mentón dividido por una cicatriz que se hizo en una pelea de bar cuando era adolescente y una marca en su ropa, si te fijas, los pantalones tienen un parche de tela, estos son los mismos que usaba para trabajar en un taller de un amigo los fines de semana, tenían un bordado en el muslo de la pierna izquierda con el logo del taller, cuando dejo el trabajo hizo que mamá lo quitara y lo parchara, pero mi mamá no tuvo tiempo de hacerlo así que lo hice yo, siempre dejo los bordes fruncidos cuando coso algo, por mucho que mi mamá me explicaba, nunca pude hacerlos perfectos como ella, y créanme, pague por esa falla –
Todos detallamos el rostro del hombre y luego el pantalón, y efectivamente, se nota bastante el desperfecto en los cuatro bordes del parche.
- Ahora que lo pienso – susurra April – en la ropa de él que hemos sacado para donar, no los he visto y tampoco recuerdo habérselos vuelto a ver cuándo regreso de Minnesota y eran su par favorito –
- Lo más probable es que se deshizo de ellos junto con la otra placa del auto de los Farrell que nunca encontraron – afirma Adolfo
- Si es medianamente inteligente, eso debió ser lo primero que hizo – confirmé
April cambia la imagen a una que sale de perfil derecho, pone el zoom y nos muestra una marca en el cuello del hombre.
- Esto es una quemadura, se la hizo cuando quedó atrapado en un incendio en el reformatorio donde estaba antes de cumplir la mayoría de edad, va del cuello hasta la mitad de su espalda –
- Eso y la cicatriz del mentón son señas muy características, serán de gran ayuda – dice Finn
- Y esto también podría serlo – ella hace zoom en la siguiente foto que lo mostraba de espaldas, como la camisa que llevaba era de mangas cortas se le veían los brazos – esta herida, supongo que ahora ya debe ser una gran cicatriz – nos señala el antebrazo izquierdo, justo al lado del codo – eso se lo hice yo con un cuchillo defendiendo a mi madre unos meses antes, no fue al médico y mi madre tuvo que hacerle las suturas y tampoco quiso hacerse las curaciones necesarias, así que se le infectó, a la final fue donde un conocido que es enfermero para que le desbridara y le dejo una cicatriz aun más grande y roja y bueno, el intento replicar su herida en mí y casi nos matamos esa vez y si no mal recuerdo, fue ese día que su amigo llego a la casa por unos documentos que él se había llevado y fue quien lo detuvo de lastimarme gravemente – dice April dejando mi celular sobre la mesa – si ese hombre no hubiera llegado, probablemente ese día me hubiera matado -
- Mierda April – Colton no lo piensa y abraza de lado a April quien se recarga en él con los ojos brillosos – nadie debería pasar por tanta mierda en su vida –
El besa su frente y ella se encoge de hombros, claramente herida por el recuerdo, tomo mi teléfono y hago capturas de las señales que ella nos indicó, las reenvío por correo a los investigadores y a los chicos.
- Gracias por ayudarnos April, con todas estas señas que nos muestras, será más fácil identificarlo – le digo – todo lo que reunamos será decisivo para que un juez reabra este caso, en serio April, muchas gracias –
April sostiene mi mirada y me dedica una sonrisa de entendimiento.
- Ustedes y toda la familia Walker hicieron mucho por mí cuando me quede sola en este mundo, así que ayudarles de regreso es lo mínimo que puedo hacer – su mirada se vuelve más afilada – y si en el proceso este hombre puede pagar al menos la mitad de sus atroces acciones, me daré por bien servida -