Marck estaba desesperado sus hombres buscaban a su hija, el detective Michael también por su lado, caminaba por la sala de la clínica, su mamá estaba en casa de Loretta para que descanse de su dolor, vibro el celular era el detective Hola Marck, ¿el auto de tu hija tiene GPS? ¿Qué cosa? ¿GPS? Yo…no me acuerdo Oye estas nervioso voy para allá Marck solo contesto por inercia su cabeza estaba en otro lado sus pensamientos en otro lado, recreaba el rictus de odio de su hija para con su abuelo y eso le dolía en toda su alma —Mi niña ¿Dónde estás? ¿Dónde te metiste? Allí estaba en la clínica un padre preocupado por su hija que salió alterada y rabiosa, esta desaparecida no se comunica, no contesta las llamadas, no se sabe nada de ella, estaba como loco ensimismado, sus manos le temblaban,