Capitulo seis

1487 Words
Sasha cerró por trabajo y salió de la oficina para ver a sus chicas dando una sonrisa cómplice a la que asintió. Todos salieron y las chicas se sorprendieron cuando vieron el BMW -¿manejas un auto nuevo ahora?- Preguntó Janet. -En realidad no, no he tenido la oportunidad de ir a casa a buscar mi auto, así que conduje el primero en que mi mano tocó las llaves-, respondió con indiferencia. Todas las damas la estaban mirando -¡qué!- Gritaron simultáneamente. Sasha los miró con el ceño fruncido -¿qué?- -Primero, escucha, dijo que primero sus manos tocaron la tecla, ¡lo que significa que son más!- Gritó Agatha. -Deja de ser una reina del drama, ¿quieres?- Sasha siseó antes de abrir el auto. -¿Qué reina del drama? Chica, estás en el dinero- respondió Marilyn y el resto asintió. Sasha puso los ojos en blanco y se subió al auto -¿Es mejor que las chicas vayan a casa y se preparen o deberíamos cancelar?- Ella enarcó una ceja y todos gritaron. -¡No te atrevas!- Ella se rió y se despidió de ellas antes de cerrar la puerta. Arrancó el auto y dio marcha atrás desde el estacionamiento, a través de su espejo retrovisor, los vio todavía mirando el auto y negó con la cabeza increíblemente. Sí, el coche es bastante brillante, pero eso no significa que tengan que comportarse así, pensó. Preocúpate menos por ellas ahora Sasha, preocúpate por tu marido y cómo le vas a decir que vas a salir, él dijo que no le hables, ¿verdad? Entonces, ¿qué va a hacer ella? ¿Debería escribirlo? -Ah- gimió -Por el amor de Dios Sasha, él es tu esposo, no tienes que dejarle una nota cuando estará en casa antes de irte- se dijo a sí misma -Solo se lo diré como una persona normal- concluyó antes de pisar el acelerador. Llegó a su nueva casa y estacionó el auto exactamente en el mismo lugar donde lo recogió, una parte de ella estaba feliz de que él no regresara antes que ella, ¿realmente necesitas estar preocupada? ¿Estás realmente asustada porque condujiste su auto al trabajo? Trató de advertirse a sí misma, pero eso no impidió que esa parte de ella estuviera feliz de que él aún no estuviera en casa. Entró a la casa y decidió hacer la cena antes de prepararse para salir con las chicas. Se apresuró con la sencilla cena que preparó y la puso en el microondas para mantenerla caliente. Corrió escaleras arriba y se dio una ducha rápida. Abrió el armario y se alegró de que su suegra realmente pensara bien en ella. Mientras buscaba entre la ropa allí, recordó que él había entrado en un vestidor esa noche y decidió echarle un vistazo. Abrió el vestidor y se sorprendió, era muy espacioso, y había muchos estantes, la mayoría contenían diferentes tipos de trajes y colores, maldición, pensó mientras entraba, pero luego un estante llamó su atención, todo ha sido vestidos de dama, de diferentes tamaños y largos y de diferentes colores, también hay otro que contiene diferentes tipos y colores de stilettos, otro para diferentes bolsos, todos valorados en millones. Maldita sea, ¿qué está haciendo Michael con todos estos vestidos femeninos? Definitivamente está segura de que no pueden ser para sus novias, porque está segura de que él no tiene ninguna, ahora los cerca de diez percheros que tienen ropa de hombre es comprensible, tal vez él les regala a sus amantes masculinos, incluso los zapatos, está segura de que en seis meses no repetirá ni uno solo. Sus dedos acariciaron los trajes y todos huelen a él, bueno, todo el armario huele a él. Pensando en él, una parte de recordarle que él podría estar en camino de regreso y que no le gustaría verla aquí, permanecer fuera de mis asuntos, ella recordó su última regla y se dio la vuelta y salió del armario inmediatamente, cerró la puerta, pero no sin echar un vistazo a la mujer que viste, ¿quién es el dueño? Ella realmente quiere saber. ¿Michael no es gay? Pero luego, en la escuela, cuando todo el mundo hablaba de ello, él no salió a negarlo. Entonces, ¿le preguntará quién es el dueño de los vestidos? ¿Y sabe que invadiste su privacidad? Una voz le advirtió y suspiró, definitivamente no puede preguntarle, solo tiene que esperar hasta que las cosas finalmente estén bien entre ellos, entonces ella le preguntará. Solo espera que no pase tanto tiempo, porque no cree que pueda esperar antes de conocer a la señora que posee los vestidos, zapatos y bolsos en el vestidor de su esposo. Suspiró y casualmente tomó un vestido rojo de su guardarropa y se lo puso, se dejó caer el cabello, se aplicó rímel y también un lápiz labial rojo, se puso sus aretes y un delgado reloj de pulsera, se miró en el espejo y puso mala cara , se veía hermosa, pero ¿su esposo lo notará? Ella duda. Cogió su bolso y su teléfono y se dio cuenta de que Janet le había enviado un mensaje de texto, ya estaban de camino al club. Ella respondió que lo estará pronto y se miró nuevamente en el espejo antes de sacarse unos tacones de aguja dorados y ponerselos. Bajó las escaleras y sus ojos miraron el reloj de pared, son casi las ocho, ¿por qué no ha vuelto todavía? Ella se sentó en el sofá, preparada para esperarlo, después de todo, no sería bueno de su parte simplemente dejar la casa sin su consentimiento, ¿verdad? Ella trajo su teléfono para llamarlo y se dio cuenta de que ni siquiera tiene su número, ¿qué clase de esposa no tiene el número de su esposo? Justo cuando todavía estaba gimiendo, escuchó el sonido de un auto estacionando y se puso de pie de un salto, miró la hora y eran las 8:15, ¿es esa la hora que él suele volver a casa? pero anoche ... Ah, olvídalo, ni siquiera sabes a qué hora volvió ayer. Se quedó mirando expectante la puerta. La puerta se abrió y entró, su traje estaba en su mano y tres botones de su camisa estaban abiertos, su mano derecha llevaba su maletín. Él la miró y desvió la mirada casi de inmediato, se dirigió a las escaleras y ella siguió -Hice la cena. Está en el microondas, ¿debo calentarla para ti?- Él la ignoró y comenzó a subir las escaleras -¿Cómo estuvo el trabajo, espero que no sea demasiado estresante?- Él todavía no le respondió -Voy a salir con mis amigas esta noche. Se suponía que las llevaría a una noche de chicas antes de nuestra boda, pero no lo hice. Quiero compensarlas hoy iré a un club cerca de ... -, estaba diciendo cuando se detuvo en seco. Michael se volvió para mirarla y sus ojos ardieron en los de ella. -Nunca supe que eras sorda- dijo con su voz profunda y sensacional -¿o simplemente estás actuando como una ignorante o haciéndote la tonta?- Sasha se mordió el labio -Solo estoy tratando de decirte a dónde voy- -¿Parece que me importa? Si quieres pasar la noche fuera, no me importa- -Michael- -Te di una regla, y es tu deber cumplirla. No me hables, ¿qué es tan difícil de entender ahí, o eres tan estúpida como para no saber cuando alguien no te quiere?- Sus palabras golpearon su corazón y ella trató de ocultar lo herida que se siente -¿debo calentar tu comida para ti?- Michael resopló -Dios, estoy casado con una idiota- la miró de nuevo -No quiero tu comida, ¿lo suficientemente claro?- Ella suspiró y asintió con la cabeza -está bien, ¿puedo salir con las chicas?- Él simplemente se dio la vuelta y continuó subiendo las escaleras. -Lo tomaré como un sí-, agregó, pero él fingió no escucharla y se dirigió directamente al dormitorio. Sasha lo miró fijamente y suspiró, justo cuando estaba a punto de pensar en su cerebro, el tono de su teléfono estalló, se apresuró a cogerlo y era Janet -¿hey niña?- Hizo todo lo posible por sonar animada. -¿Dónde diablos estás? ¡Llevamos veinte minutos esperando!- -Estaré allí, solo dame diez minutos- respondió ella y colgó. Cogió su bolso y salió corriendo de la casa. Tuvo la suerte de ver un taxi de inmediato y lo detuvo, se subió y se fueron. Arriba, había un hombre cerca de la ventana, sus ojos azules como el cristal siguieron la luz del taxi antes de marcar un número en su teléfono -averigua el club al que va la señora Brown, tienes diez minutos-, colgó y sus ojos todavía lo seguían el taxi, aunque estaba muy lejos de la vista.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD