- Tengo que irme Dani, supongo que ¿tú te quedaras? - Es mi casa- dije bromeando. - Sabes a lo que me refiero. - Me quedo aquí ¿Te veo luego? - Claro que si- me dio un último beso y salió de mi casa. Yo me quedé en el sillón procesando todo lo que había pasado y caí en cuenta de lo que había hecho. Mis amigas bajaron y me acompañaron en la sala; ninguna dijo nada por unos minutos, solo se miraban entre ellas, supongo que pensando quien era la que debía hablar conmigo. - Dani... ¿Estas bien?- preguntó Alejandra y justo en ese momento comencé a llorar por la culpa que sentía, negué con la cabeza. - ¿Por qué hiciste eso?- habló ahora Mónica. - Yo no lo sé, les dije que la extrañaba- dije sin mirarlas, sentía el peso de la culpa sobre mí. - Okay, okay, mira Dani, entiendo que te guste