El fin de semana llego rápido, me levanté tarde a eso de las diez de la mañana, aproveché que mi casa estaba totalmente a mi merced y tomé una ducha de lo más larga que pude, sentir el agua caliente me ayudaba a relajarme y mucho. Había pasado cuatro días sin ver a James, por alguna razón se había ausentado y el director dijo que había tenido problemas familiares, hasta dónde sé – los pocos rumores creíbles y coherente que circulaban sobre él– mi profesor no tenía contacto alguno con ellos. Decidí dejar de pensar en él, tenía que hacerlo o me volvería loca en cualquier momento y no quiero eso. Me toca la limpieza completa de la casa, cada fin de semana de por medio los quehaceres domésticos los realizamos Luke y yo, pero mi adorado hermano se ha fugado desde el viernes en la noche pa