POV MADELEINE
Mi vida puede resumirse en una palabra, sueños. Eso he sido y a eso me he aferrado desde que tengo uso de razón, cada paso dado, cada error y cada acierto ha sido propiciado por eso que más anhelo, una familia.
A la edad de ocho años a abandoné mi casa, un lugar gris y lleno de sombras del que poco recuerdo y de verdad lo agradezco, huí luego de ver cómo mi madre era golpeada por su marido, la sangre y los moretones en su cuerpo fueron la señal de alarma que necesite para buscar otra vida.
Pero a esa edad no pueden tomarse buenas decisiones por más que queramos, era solo una niña, una rubia y llamativa niña viviendo entre callejones oscuros y comiendo de lo que grandes restaurantes desechaban, un día el circo llegó a la cuidad en que para mis diez años me encontraba, claro
