En el piso treinta y dos Nathan hizo un gesto con la mano y firmo el cheque. Cuando se dio la vuelta, vio que Anastasia se estaba quitando la ropa. ---¡¿Qué estás haciendo?!--- Las cejas de Nathan se arrugaron de repente, con una fuerte ira en su tono exclamo --- ¡Qué demonios! ---presidente ... --- Anastasia se acercó paso a paso, se paró frente a Nathan y dijo con agravio --- He estado contigo durante seis años. ¿Merezco que me trates de esta manera? Yo… te quiero. Nathan mantuvo la boca cerrada, pero su mirada era fría como hielo. ---Ja, Ja, ja --- Nathan se burló, se acercó y le susurro al oído a Anastasia. ---¿Crees que te creeré? Deja de fingir. De ahora en adelante ¡Nunca vuelvas a venir a aquí! No en estos términos. ¡Vístete! Cuando Valentina tomo el ascensor hasta el piso tr