Sus ojos grises están clavados en mí como esperando mi reacción a las palabras que me ha dicho, pero la realidad es que no se ni siquiera cómo reaccionar. Todo esto del amor es tan nuevo para mí... Una vez que logro vivirlo, sucede esto... Tengo rabia, miedo, y un sentimiento de angustia que no había sentido antes. —Valentina. — Me dice bajito y se acerca a mí –Dime algo por favor.— Me pide y lo único que puedo hacer es entrecerrar mis ojos, verlo con dudas y como preguntándole que es lo que espera que le diga. —¿Felicidades? Vas a ser padre. — Es lo único que sale de mi boca y olvidándome de todo y de todos, me doy la media vuelta y llamo al elevador, el cual afortunadamente aún estaba en este piso y abre sus puertas rápidamente. —¡Valentina! ¡Por favor! — Me pide, e intenta entrar al