Chris me besa con pasión y desenfreno, lo había extrañado como loca; siento su lengua danzando junto a la mía, sus manos que me sostienen, su fuerte erección e instintivamente sé, que si en este momento quisiera poseerme en el ascensor, lo dejaría hacerme todo lo que quisiera sin ninguna duda.
Sus manos se desplazan por mi cintura mientras me sujeto a su cuello para seguir pegadita a él; sus manos buscan entre todas las capas de ropa que tengo puestas y suben por mi espalda, siento mi cuerpo erizarse y temblar ante su ardiente contacto ¡Se siente tan condenadamente bien!
Chris interrumpe el beso para poder recorrer con su boca mi cuello, siento su respiración sobre este y mil mariposas bailan y se pasean por todo mi cuerpo, hago lo mismo y lo beso en el cuello, gime, atrayendo de nuevo s
