Compartir con la familia Santos fue muy agradable, al final descubrí que Javier, es un hombre que nunca se interesó en enriquecerse, no sé de cuanto pueda ser su fortuna, pero al final sus colegas son su familia, la forma en que llamó a Lucía, no pareció una orden, al final respeto siempre su opinión.
Al día siguiente me dirigí a la oficina del Sr. Saúl.
—Buenos días, Sr. Saúl, quisiera saber ¿Cuándo viajaré a Orderion? Por la cita que me indico.
—Ayer te iba a avisar que nos volvieron a cancelar la reunión, no entiendo cómo es que estás personas han alcanzado el éxito, si viven rechazando a grandes inversionistas como yo.
—Estuve investigando un poco, según me di cuenta ellos disponen de amplios recursos, que no requieren de inversiones externa.
—Patrañas, su dinero tuvo que venir de
