CAPÍTULO CATORCE Keri despertó sobresaltada. Le tomó unos pocos segundos orientarse y recordar dónde estaba. Al mirar el reloj despertador junto a la cama de Ray, vio que eran las 5:17 p.m. Había estado dormida por algo más de cuatro horas. Se quedó acostada por unos minutos, permitiendo que su cuerpo y su cerebro despertaran del todo. El dolor volvía de nuevo a manifestarse en sus huesos y en sus músculos, a pesar de la tibieza de las mantas. Le dolía la cabeza y sentía su estómago vacío. Cayó en cuenta de que no había comido desde que Mags y Keith se fueron. E incluso entonces, solo había sido caldo de pollo. Había sorbido un poco de sopa mientras repasaban el plan una última vez, antes de que Mags llevara a Keith de regreso al centro comercial. Parecía que había sido hacía bastante.