—Qué subas al maldito auto—Le digo dándole un golpe al techo, el sonríe pero al final se mete al carro
—No vuelvas a golpear mi carro—Me dice molesto dentro de el—¿Y a donde vamos?
No contesto y conduzco llegamos a una fábrica y por su cara no tiene idea de que es.
—Hola—Le digo al guardia—Somos Elián Nikolou y Claus Vlachos.
El guardia nos deja pasar, nos da las indicaciones de seguridad y nos indica el camino, Claus está completamente perdido.
Lo guió hasta las partes más profundas y llegamos lo pongo a trabajar
—Yo no haré eso—Me dice cuando Comienzo a cargar unos bultos de un lado a otro, y de verdad se sienta en la escalera a observar lo que trabajo. Hablo con los trabajadores y el observa. Llega la hora de la comida donde en el comedor se divide entre los puestos de trabajo. El
