-Ay no, ustedes dos parece como si se hubieran puesto de acuerdo en responder – dijo Michelle bromeando y todos nos empezamos a reír, o al menos yo fingí reírme. Después de ese momento tan incomodo, Andrew decidió cambiar de tema, y por primera vez después de tanto tiempo le agradecía que hiciera algo. Todos seguimos disfrutando de la cena tranquilamente cuando de repente las luces del lugar se volvieron tenues, mi corazón se empezó a acelerar, había perdido por completo la noción del tiempo y había olvidado lo que sucedía después de las 9:30 pm. -Qué raro, quizás ya van a cerrar, tal vez lo mejor sería irnos – dijo Andrew y yo inmediatamente le seguí la corriente. - Si quizás sea lo mejor – tomé mi cartera lista para levantarme. En ese momento varias parejas se levantaron y empezaron