||Narrador|| El sonido de los impactos fueron el inicio de una destrucción, aquellos hombres que pisaban la propiedad no se detendrían hasta ver al cacique caer, El juego había comenzado ellos habían llegado, Pocos resultarían vivos. El segundo los dos sujetos quienes mantenían una conversación interesante habían dejado aquel tema atrás, enfocándose en lo que realmente les importaba que era protegerse. Grito de terror y balas penetrando el concreto fueron una conmoción, hombres a unos metros perdieron la vida y otros se escondían bajo muebles, Sin importar todo eso el hombre de ojos oscuros miraba todos los sujetos en el lugar, sus hombres. —Tiene permitido disparar— sentenció con una voz fría, su personalidad más rota había aparecido, en segundos dejo de pensar en el bienestar de aque