Prólogo
—Hace tres meses que te fuiste sin avisar,tu regreso a mi vida que lo haría diferente ahora?—dice Nazly mirando con lágrimas sin derramar al hombre parado frente a ella con aquella mirada verdosa.
—Nazly si tan solo escucharás lo que tengo que decirte sobre mi ausencia entenderías lo mucho que me dolió dejarte—expresa aquel hombre acercándose un poco más hacia ella.
—Jaja si claro—suelta una risa sarcástica Nazly mientras cruzaba los brazos bajo su pecho evitando más el acercamiento de aquel hombre.
—Aunque no lo creas tú fuiste lo mejor que me pasó en la vida—le confiesa aquel hombre tratando de tocarla pero Nazly se aleja instintivamente como si aquel tacto le quemará.
—Si te importe tanto por qué te largas te sin mí?,Eh porqué?!—grita Nazly con dolor derramando una lágrima.
—Tenía que hacerlo pero eh vuelto por ti,mi amor—le responde el sujeto acercándose a ella mientras le limpia las lágrimas con sus pulgares suavemente contra sus mejillas.
—Ya es tarde para nosotros Adam— dijo Nazly cerrando sus ojos.
—No digas eso,aún podemos si tú me permites explicarte—le ruega Adam levantando su barbilla hacia arriba para observarla.
—Quiero el divorcio!—le confiesa Nazly rápidamente al abrir los ojos.
—Nunca!—niega molesto alejando sus manos de su rostro.
—Te odio,maldita seas!—suelta Nazly con frialdad.
—No voy a dejarte ahora menos que se la verdad!—expulso Adam con furia mientras aprieta sus manos en puños con fuerza haciendo que los nudillos se le tornaran blancos.
—Nose de que estás hablando y no me interesa saberlo—le dice Nazly comenzando a caminar hacia la puerta.
—Tu sabes de qué verdad te estoy hablando!—grita furioso Adam siguiéndola con la mirada.
—No puedo seguir casada contigo,me haces daño—expuso ya cerca de la puerta y antes de que la abriera para salir fue acorralada entre esta y el cuerpo de Adam con sus brazos a cada lado arriba sobre su cabeza.
—oh pero que te pasa?!,acaso estás loco!—grita Nazly asombrada ante su arrebató.
—Si lo estoy pero por ti.
—Quiero que me sueltes y me dejes ir ahora mismo!—le exige Nazly levantando la barbilla altiva sin temor a la mirada furiosa de Adam.
—Eso jamás Nazly,tu aún sigues siendo mía!
—Nunca lo fui!—Le responde empujando lo sin ningún éxito,Adam la sujeto con más fuerza de los brazos sobre su cabeza.
—Suelta me!—grita Nazly tratando de soltarse.
—Jamás!,vas a tener que escuchar me aunque sea por la fuerza Nazly—le dijo Adam con seriedad mientras apretaba su mandíbula molesto y excitado de volver a ver a su mujer tan irreverente y testaruda después de tres meses.
Mirando la a los ojos Adam se preparo mentalmente con las palabras que le diría antes de expulsarlas.
Nazly mirándolo desafiante esperaba que comenzará a hablar aunque por dentro todo su cuerpo lo sentía paralizado,nervioso y con una gran inestabilidad de estar de nuevo entre sus brazos.
Ella esperaba que todo lo que saliera de sus labios después no la hiciera caer nuevamente hacia él por qué en el fondo sabía que no podría evitar regresar a su lado y más aún con aquel pequeño secreto albergado en su interior.
Sabía que con una palabra bastaría para caer de nuevo por qué si hace un tiempo atrás lo hizo aunque se odiaban y lograron enamorarse,estaba segura que está vez sería igual,lo haría de nuevo perdidamente porque lo que ambos sentían el uno por el otro era algo único, especial.
Dicen que el destino aveces es igual que el mismo tiempo ya que todo lo que nos ocurre está determinado a ser asi aunque tratemos de evitarlo,otros dicen que es uno mismo el que decide trazar su propio destino,uno decide que camino tomar para su vida pero los que se ven obligados a vivir algo diferente a lo creían haber soñado como yo de tener un destino libre,se vuelve absurdo e imposible.
Toda mi vida desde que era pequeña había sido educada a la manera que mi familia creía correcta, jamás sin detenerse a preguntarme si lo que me imponían lo deseaba hacer o incluso como me sentía al respecto,pase mucho tiempo dándoles gusto,que cuando deje de ser una niña,me olvide totalmente de mi misma,mi propia identidad y autoestima estaba al borde de un abismo incierto que la sensación era tan frustrante hasta que un día tome el valor suficiente para gritarlo,cuánto me cansé de hacer y ser lo que ellos querían que fuera pero nada bueno salió de ello después de revelarme con una de mis actitudes testarudas(reprimidas),mi madre se volvió mi sombra,me mantenía constantemente vigilada que su acoso era asfixiante.
Un dia llegué a pensar en escapar pero no lo hice cuando mi padre se accidentó,me mantuve de nuevo a merced de mi madre que sólo se dedico en seguir moldeando me la vida a mi y a mi hermano a su antojo.
Le había dado una gran pelea a mi madre que el sueño de alejarme de aquí,un día se me cumplió pero no como yo lo deseaba, fui obligada a irme de mi casa, separando me de aquellas personas que eran especiales en mi vida y formaban parte de mi corazón,tenía sólo 17 años cuando mi madre me envió a un internado en Francia sin importar le el alejarme de mi hermano,mi padre y de ella misma con tal de cumplir su objetivo para darle orgullo a nuestro apellido.
Cuando me fuí lo había hecho con un gran resentimiento que tarde meses en responder las llamadas y cartas que mi madre me enviaba pero al final no tuve más que resignarme a estar en Francia estudiando.Dos años después me gradué pero no regrese enseguida a casa,mi madre no me lo permitió creyendo que no era oportuno así que tuve que permanecer ahí una temporada.
Durante unos meses en ese país logré independizar me,sentir me libre,plena y feliz construyendo mi propio camino, viviendo el día a día como si fuera el último, era tan perfecto que olvide que tenía otra vida del otro lado del mundo con una familia hasta que mi destino volvió a cambiar con esa llamada de mi madre pidiendo me volver.
Si me hubiera negado a hacer lo tal vez jamás lo habría conocido a él, Adam Thompson el magnate de hielo a quien media ciudad reconocía excepto yo,el hombre que se volvió socio de mi papá con mentiras y que cambio mi vida completamente con un contrato matrimonial«La razón por la que tuve que abandonar aquella vida de paz y libertad en Francia«
Me llamo Nazly y está es mi historia de como el odio y la venganza conecto nuestras vidas,como surgió ese amor inexplicable que sello mi destino.