Mis ojos se posaron aún más en la niña que estaba gritando mientras corría hacia su hermano mayor. Sus pequeñas piernas estaban adornadas con un par de pantalones cortos y una blusa de lunares de mariquita que tenía volantes en las mangas. Mi boca se abrió en adoración, mirando la mirada brillante en sus ojos verdes grisáceos. Tenía los rizos castaños que tenía Harry, más sueltos y menos frecuentes, casi lisos. Pero le sentaba bien a su rostro en forma de corazón, mejillas regordetas y piel ligeramente bronceada. Sus pequeños pies los descalzamos en el suelo.
Los hoyuelos en sus mejillas eran tan adorables que tuve un ataque al corazón al ver a Harry agacharse, con los brazos abiertos mientras ella prácticamente saltaba sobre él. Harry estaba sonriendo locamente, y pude ver mucho parecido
